“Cerca del 50% de la fuerza laboral se verá afectada” por los despidos, señala un correo electrónico al que accedió la AFP, que fue enviado a los empleados de Twitter que perdieron sus trabajos luego de la compra de la empresa por 44.000 millones de dólares.
Los empleados de la firma habían sido llamados a quedarse en casa este viernes a la espera de la ronda de despidos, en el marco de una reestructuración de la compañía lanzada por Musk.
La firma californiana comunicó a cada empleado su decisión a través de un correo electrónico, y anunció el cierre temporal de oficinas.
“Como fuera anunciado hoy (por ayer) más temprano, Twitter reduce sus efectivos para ayudar a mejorar la salud de la empresa. Estas decisiones nunca son fáciles y es con pena que le escribimos para informarle que su puesto en Twitter se ve afectado. Hoy (viernes) es su último día de trabajo”, indica uno de los correos enviados a los empleados al que ha tenido acceso la AFP.
Los trabajadores se vienen preparando para la reducción de la plantilla desde que Musk completó la semana pasada la adquisición de la compañía por 44.000 millones de dólares, y rápidamente se dispuso a disolver su junta directiva y a despedir a su director ejecutivo y altos gerentes.
Algunos trabajadores ya se habían enterado el viernes de que los habían echado y recurrieron a la red del pájaro azul para despedirse de sus colegas.
Un correo electrónico enviado a los empleados de Twitter el jueves les indicaba que no se presentaran a trabajar el viernes.
“Nuestras oficinas estarán cerradas temporalmente y se suspenderá toda credencial de acceso”, decía el mensaje.
El viernes, Musk culpó de la caída de los ingresos de Twitter a “un grupo de activistas que presionaron a los anunciantes a pesar de que nada cambió con la moderación del contenido e hicimos todo lo posible para apaciguar a los activistas”.
"¡Es realmente una tontería! Están tratando de destruir la libertad de expresión en Estados Unidos”, agregó.
Pero grandes empresas, como General Motors y Volkswagen, suspendieron su publicidad en Twitter tras la adquisición. Grupos de derechos civiles han expresado preocupación de que Musk permita discursos de odio e información errónea y que restablezca cuentas bloqueadas, incluida la del ex presidente estadounidense Donald Trump, expulsado poco después del asalto al Capitolio, el 6 de enero de 2021.
7.500
empleados tiene Twitter, de los que la mitad serían despedidos de la red social adquirida por Elon Musk.