La decisión de levantarle el sigilo por primera vez a un presidente en ejercicio de su mandato en Brasil fue anunciada por el magistrado Luis Roberto Barroso, uno de los miembros del Supremo Tribunal Federal e instructor del proceso en que se investiga al gobernante por supuestamente haber recibido sobornos de una empresa portuaria.
La Corte investiga si un decreto sancionado por Temer y que alteró la ley de puertos benefició a la empresa Rodrimar a cambio de sobornos pagados al partido Movimiento Democrático Brasileño, que lidera el propio jefe de Estado. Para el Gobierno, ese proceso parecía superado luego de que el entonces director de la Policía Federal, Fernando Segovia, afirmara en una entrevista en febrero que lo más probable es que esa investigación sea archivada por falta de pruebas.
La declaración anticipando la absolución generó intensas polémicas y fue una de las razones que llevaron al Gobierno a sustituir hace dos semanas al jefe de la Policía Federal pero los ministros más cercanos a Temer pensaban que el proceso no avanzaría. La decisión judicial que mantiene vivo ese proceso se produjo una semana después de que la Corte, en otro caso, incluyera a Temer entre los sospechosos en una investigación sobre los sobornos pagados por la Odebrecht. efe