La reducción de 1,25 puntos porcentuales que aplicó el BCP a su tasa de referencia este año tuvo como objetivo dinamizar el mercado y contrarrestar así los efectos de la recesión económica, a través del abaratamiento del crédito. En el primer semestre del 2019, el producto interno bruto (PIB) se contrajo en 2,5% y las proyecciones para el cierre del año fluctúan entre una caída de 1% y un modesto crecimiento de hasta 1%.
El banco Itaú observó un inicio de recuperación de la actividad económica del país desde el tercer trimestre. En su informe mensual, la firma sostuvo que “el proxy oficial del PIB mensual (Imaep) creció 7,6% anualizado secuencial en el trimestre terminado en agosto respecto al trimestre anterior. En el segundo trimestre de 2019 se había registrado una contracción anualizada del 3,6% en la misma medida. Por otro lado, el Imaep creció 0,1% anual en el trimestre móvil a agosto, tras siete caídas consecutivas”.
El banco de origen brasileño espera que el BCP alce a 4,25% la tasa de política monetaria, en el 2020.