“Si queremos llegar a nuestro objetivo tan soñado, que es el acceso universal a los servicios de salud, la única manera que podamos llegar es, en primer lugar, trabajar en forma articulada e integrada y empezar a construir nuestro sistema único de salud”, refirió.
La propuesta generó un intenso debate y rechazo, ya que según varios referentes de organizaciones se plantea una fusión con el Instituto de Previsión Social (IPS).
La doctora Rosanna González del Sinamed y la licenciada Mirna Gallardo de APE mencionan que un sistema integrado se debe llevar adelante de manera eficiente.
Para González, es necesario esto. Sin embargo, no debe cargar todo el peso en el aportante del IPS. Por su parte, Gallardo menciona que un sistema integrado contribuirá a un mejor trabajo entre las Unidades de Salud de la Familia (USF) y los hospitales.
Barán justamente ha planteado la necesidad de contar con más USF para reforzar la atención primaria.
Desde Alames, Montserrat Vera manifiesta que al escucharlo así la propuesta parece algo buena. Pero tienen otro análisis al respecto.
“Escuchando un poco así de buenas a primeras pareciera una buena opción, pero lo que tiene detrás tiene que ver un poco con una reforma que se orienta hacia un sistema de aseguramiento y cuando hablamos de aseguramiento esto tiene que ver con paquetes de servicios” , explica.
Agrega que con esa idea de paquete de servicios, se pierde la visión de integralidad de la salud, la visión de universalidad, lo que tiene que ver con la universalidad en el acceso a los cuidados integrales de la salud.
“Entonces el sistema de coberturas es el sistema de aseguramiento que propone desde hace bastante tiempo el Banco Mundial y que se ha implementado en algunos países como en Colombia y en realidad los resultados para la gente han sido devastadores”, revela Vera.
Según dice, si el Estado no destina más recursos a la salud, se precarizará aún más. Esto llevará a que los ciudadanos estén de acuerdo con una privatización, lo que resultará perjudicial.