El liberal Carlos Enrique Silva fue uno de los firmantes del primer documento para solicitar la pérdida de investidura del colorado José María Ibáñez. Sin embargo, ayer fue el único liberal que se manifestó expresamente a favor de su colega y en una confusa argumentación intentó explicar su posición.Dijo que la Cámara necesitaba discutir temas de mayor interés para la ciudadanía y que su criterio era que “no podían sobreponer un criterio político sobre una cuestión jurídica”. Sostuvo que no amerita que los diputados “hagan justicia por mano propia” ante presiones foráneas a la institución y que no deberían dejar un precedente al respecto.