Para la senadora Esperanza Martínez (Frente Guasu), aún no está determinado el apoyo o el rechazo que tiene la propuesta de gravar la exportación de granos de soja, aprobada en general hace más de un año.
“Sé que hay sectores del Partido Colorado, del Partido Liberal, del PDP (Partido Democrático Progresista), Payo (Paraguayo Cubas) tal vez y el Frente Guasu”, dijo la legisladora al ser consultada sobre el apoyo con el que contarían el jueves durante el tratamiento del proyecto.
Los sectores que ya hicieron público su rechazo al proyecto son los colorados de Honor Colorado y Patria Querida. Esta última es la bancada que más ha manifestado públicamente su rechazo a establecer un tributo a la soja y a otros productos, especialmente en redes sociales y programas de televisión.
La bancada que responde al presidente Mario Abdo Benítez aún no expresó su posición, recordó. “Vamos a trabajar esta semana con cada uno de los sectores para tratar de conseguir los votos”, reiteró Martínez.
Emblemático. La senadora, que es una de las proyectistas, explicó que este proyecto es emblemático porque desafía un modelo económico que desde hace años perpetúa la desigualdad.
Este modelo afecta a las dos grandes riquezas con las que cuenta nuestro país, las cuales son la tierra, que ofrece infinitas posibilidades para producir, y la gente joven, que es la fuerza de trabajo, dijo.
“Lo que ha hecho este modelo agroexportador predominante es concentrar la riqueza y el trabajo en un grupo que no pasa el millón de personas. Esto, produciendo contaminación, éxodo importante de la gente”, señaló.
Es decir, este modelo produce muy pocos puestos de trabajo y además contamina el suelo, el agua y el aire, citó. “Hay un daño social, económico y ambiental muy importante”, resumió.
Lo que se plantea con esta propuesta es “pagar todo esto, pero en sentido positivo”, dijo. Con una mayor contribución a las arcas del Estado a través de impuestos directos, se podrían compensar esas desigualdades, explicó la proyectista.
Números. Al ser consultada sobre su opinión acerca de que el sector a ser gravado alega que ya paga impuestos, dijo que “no es un problema de números nomás”, sino que “deben aportar más los que concentran la mayor cantidad de recursos y su crecimiento es a expensas del resto de la población”, dijo.
Es este mismo concepto el que se aplica en todo el mundo para determinar los aportes al Tesoro, señaló.
“Las políticas tributarias se aplican en los lugares donde se generan riquezas, en todas partes del mundo ocurre esto. Por supuesto donde hay pobreza no podemos cobrar, pero aquí paga la clase media y la baja. La gente poderosa nunca pagó impuesto y vive escandalosamente bien”, concluyó.
