En una imagen muy inusual para el habitual hieratismo de los líderes chinos, Xi se saltó por una vez el protocolo para acusar al canadiense, delante de las cámaras, de haber filtrado el contenido de una reunión privada mantenida anteriormente.
“Todo lo que discutimos se ha filtrado a los periódicos. No es apropiado, y además tampoco es la forma en la que se llevó a cabo nuestra conversación”, le espetó Xi a Trudeau ante la presencia de un traductor.
“Si está siendo sincero, debemos comunicarnos con respeto mutuo. Si no, no estoy muy seguro de qué va a pasar”, agregó.
Trudeau, impasible frente a la regañina, respondió que “en Canadá creemos en el diálogo libre, abierto y franco”, y que “eso es lo que seguiremos teniendo”.
“Continuaremos buscando trabajar juntos de manera constructiva, pero habrá cosas en las que no estaremos de acuerdo”, añadió.
Xi interrumpe entonces al líder canadiense para exigirle en dos ocasiones que tiene que “crear las condiciones” para seguir hablando, antes de sonreír, estrecharle la mano y marcharse.
La interacción entre ambos fue grabada por los periodistas canadienses que acompañaban a Trudeau y se ha convertido en viral a raíz de su publicación en redes sociales como Twitter por parte de la cadena CTV National News.
Según la prensa canadiense, el enfado del líder chino viene porque el diario National Post informó de que en una conversación mantenida el pasado martes, Trudeau le planteó “graves preocupaciones” por presuntas interferencias de China en las elecciones canadienses del 2019.
La conversación informal de cerca de diez minutos que ambos habían mantenido el martes en la apertura de la Cumbre del G20, por iniciativa de Trudeau, se había filtrado también, ya que el primer ministro canadiense había confrontado a Xi por su postura frente al cambio climático. Aunque no se dieron detalles sobre las cuestiones tratadas, la prensa canadiense indicó que otros de los temas que Trudeau planteó a Xi fueron la invasión rusa de Ucrania, el respeto a los derechos humanos y el lanzamiento de misiles balísticos por parte de Corea del Norte.