La obesidad en adultos y en niños es un grave problema que se observa en el país tras la pandemia del Covid-19, razón por la cual el Ministerio de Salud recomienda a la población practicar buenos hábitos, como hacer actividades físicas, comer saludable, evitar el alcohol y no fumar.
Esto teniendo en cuenta, principalmente, que el exceso de peso no es un factor de riesgo solo para el Covid-19, sino que también predispone a sufrir insuficiencia cardiaca, descompensaciones por hipertensión, derrame e infarto.
La Dra. María Paniagua, directora del Programa Nacional de Prevención Cardiovascular, destacó que la situación de la población paraguaya con respecto a la obesidad no era favorable antes de la pandemia, pero tras más de un año y medio de encierro, la obesidad aumentó como consecuencia del aislamiento, la inactividad física, sumado al estrés de la pandemia.
Al inicio de la emergencia sanitaria, los hospitales estaban llenos de casos con Covid-19; sin embargo, a más de un año se registra una gran cantidad de pacientes con enfermedades cardiovasculares: por insuficiencia cardiaca, por descompensación a causa de la hipertensión, infarto del miocardio o accidente cardiovascular, según la especialista.
Refirió que el aumento de consultas y urgencias relacionadas con estas patologías probablemente se deban a los factores de riesgo que fueron aumentando con la pandemia y por no acudir a los controles por temor al virus.
Ante esta situación calificada ya como una epidemia, Salud –a través del Programa de Prevención Cardiovascular– recomienda ir a los hospitales para el chequeo cardiológico y realizar al menos una vez al año electrocardiograma.
También son importantes los estudios, como análisis de sangre para examinar el nivel de glucemia, colesterol y triglicéridos, para detectar la existencia de factores de riesgo y tratarlos de forma oportuna.
Paniagua insta a los hipertensos a no abandonar su medicación y a acudir a los controles con regularidad para controlar la presión arterial.
Además es importante mantener un estilo de vida saludable, consumir a diario frutas y verduras, disminuir el consumo de frituras, panificados y dulces, y abandonar el hábito tabáquico , consumo prudente de alcohol y, principalmente, realizar actividad física para bajar de peso.
El exceso de peso contribuye a la inflamación de todas las arterias del cuerpo causando que la grasa mala que circula por la sangre ingrese a las arterias, a través del endotelio provocando obstrucción, llegando a tal punto que cause un infarto agudo de miocardio o el accidente cerebrovascular (derrame).
También se recuerda que la obesidad provoca en el organismo resistencia a la insulina dando lugar a la diabetes.
