La carencia de señalizaciones de orientación e información a los conductores caracteriza a la ruta que conduce a Nueva Italia, a partir del desvío a la vía que va a Villeta. Un establecimiento educativo, además, está desprotegido al no existir ni lomadas sobre el pavimento.
Para que el que no sea un lugareño y quiera llegar a Nueva Italia, o a la compañía Tacuruty, desde el desvío de la ruta a Villeta no lo podrá hacer si no encuentra una persona que viva en la zona y pueda darle alguna orientación, porque no hay ningún cartel señalizador.
Esta ruta asfaltada carece de las señales que indiquen el destino final y tramos intermedios desde la vía que va hasta Nueva Italia. Sólo existen en el lugar unos carteles publicitarios y uno que señala “Bienvenidos al distrito de Villeta”, en el inicio del cruce de la carretera.
UNA ESCUELA. La ausencia de las señales sobre la ruta que conduce a Nueva Italia también afecta a la comunidad del centro educativo Alejo Robadín, ubicada en la compañía Tacuruty de Villeta. Este local está sobre la ruta que está asfaltada en esa zona y que llega a Nueva Italia.
Unos metros antes de la escuela no existe ninguna señal de advertencia de la existencia de un local escolar.
Los propios profesores del local señalaron que también hace falta una lomada (reducidor de velocidad) a fin de proteger de la velocidad de los vehículos a los niños a la hora de cruzar la calzada.
El Ministerio de Obras Públicas es la institución encargada de llevar adelante las obras viales y que también debe tener a su cargo concretar la señalización de las vías.
El asfaltado de la ruta no llega hasta Nueva Italia, sino hasta el límite con el distrito de Villeta. La obra se suspendió el año pasado.