Por Gustavo R. García
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La Unidad Técnica Especializada (UTE), en coordinación con la División de Delitos Económicos, asestó un duro golpe a la piratería y falsificación de baterías y estuches de celulares, interviniendo un contenedor que se hallaba en el microcentro de Ciudad del Este.
El operativo se denominó “Galeno” y fue ejecutado bajo la coordinación del Ministerio de Industria y Comercio, que logró desbaratar toda una red que según los primeros cálculos la mercadería incautada supera el millón de dólares.
Con la ayuda de la Fiscalía, los funcionarios de la UTE y del MIC lograron detener el contenedor Nº TTNU 9722260, de cuyo interior los intervinientes se incautaron de 21.500 baterías para celulares de la marca Nokia; 1.000 baterías Motorola; 12.300 carcazas para celulares Nokia.
Además de 1.390, de Motorola y 15 cajas de pilas recargables de la marca Sony. El valor de estas mercaderías es de 1.140.000 dólares.
Los modelos de las carcazas de celulares corresponden a modelos de reciente lanzamiento por parte de los fabricantes tanto de las marcas Nokia como de Motorola, anticipándose los falsificadores a la importación legal de las partes genuinas de los modelos tomados en el operativo.
Las mercancías tomadas son de origen chino e ingresaron al país el 15 de noviembre último, vía la Zona Franca Transtrade, de Ciudad del Este, proveniente de Montevideo, Uruguay.
A esta intervención se suma otra anterior realizada el viernes pasado, consistente en la intercepción de una unidad de transporte sobre la ruta Nº 7, con el contenedor Nº TCKU 9326677 del que también las autoridades se incautaron un total de 3.044 carcazas de teléfonos celulares de la marca Nokia, totalizando un valor de 39.572 dólares.
Fuentes de la investigación indicaron que el operativo realizado constituye un récord en incautación de una sola vez, teniendo en cuenta que en años anteriores no se ha igualado la cantidad mencionada arriba.
Refirieron que de haber ingresado estos productos el esfuerzo para quitarlos de circulación hubiese sido mucho mayor teniendo que recurrir a semanas de investigación, mover al Ministerio Público, al Juzgado y la Policía para producir allanamientos y encontrar solo pequeñas cantidades.