15 feb. 2025

“Dignidad de niños nacidos y no nacidos debe ser respetada”

EFE
Ciudad del Vaticano
El papa Benedicto XVI pidió que se respete la dignidad de los niños, “tanto los nacidos como los no nacidos”, muchos de los cuales sufren y son explotados en el mundo, y pidió a Dios que ayude a los hombres a lograr ese objetivo.
Durante la homilía de la tradicional Misa del Gallo, el Papa dijo que Dios enseña a “amar a los pequeños, a amar a los débiles, a respetar a los niños”.
Benedicto XVI indicó que “el Niño de Belén dirige nuestra mirada hacia todos los niños que sufren y son explotados en el mundo, tanto los nacidos como los no nacidos. Hacia los niños que, como soldados, son introducidos en un mundo de violencia”, a los que deben mendigar, sufren miseria y hambre, a los “carentes de todo amor”.
El Papa pidió orar para “que el resplandor del amor de Dios acaricie” a todos esos pequeños y para que ayude a los hombres a hacer todo lo que esté en su mano “para que se respete la dignidad de los niños; que nazca para todos la luz del amor, de la que el hombre tiene más necesidad que las cosas materiales necesarias para vivir”.

SENCILLEZ. La señal de Dios es “la sencillez”, es “el niño”, es que "Él se hace pequeño por nosotros; éste es su modo de reinar. Él no viene con poder y grandiosidad externas”, pues “no quiere abrumarnos con la fuerza, nos evita el temor de su grandeza”, agregó en la homilía.
En una Basílica de San Pedro llena de fieles, el Papa indicó que Dios “pide nuestro amor, por eso se hace niño”, y agregó que “se ha hecho pequeño para que nosotros pudiéramos comprenderlo, acogerlo, amarlo”.
La tradicional Misa del Gallo comenzó con el anuncio del Nacimiento del Señor con la lectura del antiguo texto de las “Kalendas” y durante la ceremonia un grupo de niños realizó un homenaje floral ante una imagen del Niño Jesús.