Parlamentarios del partido Patria Querida instan a sus colegas a renunciar a la custodia policial asignada por el Congreso, de manera que los uniformados estén al servicio de la ciudadanía en las calles, ante el peligro que genera el asedio de los delincuentes y criminales.
En ese sentido, la diputada Rocío Vallejo señaló que “la custodia policial solamente se justifica en caso de alguna amenaza concreta”, hacia un legislador.
“Insto a mis colegas que sus custodios pasen a servir a todos los paraguayos que viven día a día la inseguridad en las calles”, manifestó.
La legisladora aseguró que no utiliza el servicio de custodia policial.
El senador Fidel Zavala precisó que ni un solo legislador de Patria Querida cuenta con custodia policial.
“Respetando los principios de austeridad en los que creemos en Patria Querida y porque es la ciudadanía la que debe ser protegida, ni un solo legislador de nuestro partido tiene custodia policial”, aseguró el legislador, quién fue años atrás víctima de secuestro por parte del EPP.
La asignación de policías para la custodia de los congresistas es muy cuestionada luego de que saliera a luz un informe que señala qué el diputado y presidente de la Cámara Baja, Miguel Cuevas cuenta con 14 policías para su resguardo.
Si bien el legislador de Paraguarí negó que los uniformados que cuidan su seguridad sean 14, sí admitió que 6 efectivos policiales están con él todo el tiempo como seguridad personal. Otros 3 custodian su residencia en la ciudad de Sapucái y 3 efectivos más están en la casa dónde reside el legislador en Asunción.
Indicó que no se opone a que los uniformados cumplan con su función de proteger a la ciudadanía. No obstante, hasta ahora no renunció al servicio.
Son 48 de los 80 diputados quienes utilizan el servicio de custodia policial. También senadores y parlasurianos tienen ese privilegio.
Casi todos cuentan con uno, dos, tres o cuatro policías a su cargo, salvo Cuevas y el titular del Congreso, Silvio Ovelar, quienes cuentan con catorce mientras que otro grupo, incluidos los legisladores procesados e investigados, tienen entre cuatro y ocho policías para su protección. Los efectivos tienen una gratificación extra en sus salarios al cumplir con la función de custodiar a los senadores y diputados. Los que son asignados a los diputados perciben G. 1.100.000 sobre sus salarios. En tanto, los policías que custodian a los senadores y parlamentarios del Mercosur perciben G. 1.400.000.