Arbo criticó la forma en que las personas encargadas de las políticas públicas ignoraron el estudio que demostraba la ineficacia de las vacunas contra la varicela.
“La obligación de aquellos que dirigen las políticas públicas es tener en cuenta la información y no matar al mensajero”, refirió en comunicación con radio Monumental.
Insistió en que las políticas públicas deben estar actualizadas, ya que la información, en medicina, es renovada constantemente en busca de la salud de las personas.
“Acá la respuesta es hacer caso a la ciencia”, reiteró.
Una publicación del Clinical Inmunology, que data del 2014, aseguraba que la vacuna contra la varicela distribuida en nuestro país usa una cepa coreana que no disminuye la cantidad de casos ni la gravedad.
Esta afirmación fue reconfirmada por Arbo, quien denunció que estas dosis seguían siendo distribuidas, pese a comprobarse su efecto nulo en las personas.
Tras las declaraciones del ex ministro, la cartera de salud emitió un comunicado en el que refiere que las vacunas son proveídas por el Fondo Rotatorio de la OPS, desde hace 39 años.