EFE
Brasilia
La Policía Civil de Brasilia anunció ayer que apoyará la huelga convocada por la Policía Federal brasileña para el próximo día 18 y que acompañará a los agentes federales en una manifestación en la capital de Brasil para pedir reajustes salariales.
Ambos cuerpos paralizarán el próximo miércoles sus actividades por 24 horas en la capital brasileña y realizarán una inédita movilización conjunta frente al Ministerio de Planeamiento, dijeron ayer fuentes sindicales.
Esta será la segunda paralización en un mes de la Policía Federal brasileña, que reclama un aumento salarial del 30 por ciento prometido por el Gobierno el año pasado durante una larga negociación que ahora considera papel mojado.
El sindicato que representa a los miembros de la Policía Federal anunció en un comunicado que, en este caso, la paralización será más “radical” que la del pasado 28 de marzo, cuando a última hora se suspendió la convocatoria de una huelga de celo en los aeropuertos de São Paulo para no agravar el caos en medio de la mayor crisis aérea de la historia de Brasil.
CELO EN LOS AEROPUERTOS. Los policías federales aseguran que en esta ocasión, además de suspender los servicios básicos, como la expedición de pasaportes, van a cumplir la amenaza de realizar la huelga de celo en los aeropuertos de todo el país.
“Vamos a intensificar las inspecciones en puertos, fronteras y aeropuertos. El rigor será total”, asegura el documento.
Los federales pretenden cumplir escrupulosamente con los procedimientos de identificación de todos los pasajeros, incluidos los vuelos nacionales, lo que puede reeditar las escenas de caos vividas en los aeropuertos en vísperas de Semana Santa.
En esas fechas un motín de los controladores de vuelo paralizó la actividad aérea en todo el país.