Melgarejo sostuvo que en ningún momento tramitó algún financiamiento del Fondec y está dispuesto a demostrar que utilizaron su nombre para estafar a la entidad.
Sin embargo, el hombre de 70 años, que reside en Bolivia, tuvo que ser recluido en el Departamento de Judiciales, ni bien llegó al país para aclarar la situación.
Su abogado Fabián Martí asegura que utilizaron su nombre y su firma para pedir fondos. Ahora el artista tomará acciones legales contra las personas que usaron su identidad para cometer el hecho punible, según aseguró su representante legal.
Además de Melgarejo, quien espera ser sobreseído en forma definitiva, otras cuatro personas quedaron desvinculadas del caso, entre ellas Maira Sharin Aliendre, Pablo David Rojas y Hugo Palacios.
LA ESTAFA. En noviembre del año 2015, la abogada María Elena Barrios presentó carpetas con proyectos para la publicación de libros en los que nombró a varios escritores del medio. Pero un estudio realizado por la entidad, permitió descubrir que los documentos no eran auténticos.
El Fondec, a través de Asesoría Jurídica, realizó la denuncia al Ministerio Público por “tentativa de estafa” señalada en el artículo 187 del Código Penal y la “presentación de documentos no auténticos” al “buscar obtener un beneficio patrimonial indebido a través de la presentación de proyectos”.
Melgarejo se hizo conocido en el país como jugador de fútbol. Jugó primeramente en el club Libertad y luego emigró a Bolivia, donde decidió echar raíces desde hace muchos años. En el país, tiene familiares en Caaguazú.
Al retirarse de la actividad profesional, se dedicó a la literatura, principalmente a los cuentos para niños.
Según explica su abogado, él nunca tuvo intenciones de publicar algún libro en el país, ya que sus actividades las realiza en Bolivia y Perú.