(EFE).- Domingo señaló en el Palacio de Cibeles, ante las preguntas de los periodistas, que “no cree” que dirigir el Real sea una opción para él actualmente.
“Mi situación de artista, ya sea cantando o dirigiendo, es algo que es un privilegio, y cuando te vuelves director de un teatro es algo como un funcionario; tienes otro poder que se confunde”, dijo.
Si sigue “activo artísticamente”, ha subrayado, no se hará cargo de un teatro porque no quiere “que una cosa se confunda con la otra: van a decir ‘bueno está cantando’ y si luego me pongo a cantar dicen ‘mira, es el director y se ha dado funciones para cantar’”.
Lo ve, pues, “dudoso” porque no quiere tener “problemas” y además, “representa mucho trabajo”, pero, añadió, “no se puede decir de este agua no beberé”.
Él ya dirige la ópera de Los Ángeles pero allí, ha matizado, “es todo mucho más fácil porque todo es una iniciativa privada y no dependes de nadie más que de la gente que con todo el entusiasmo son mecenas hacia la ópera”.
Domingo, que ha viajado a Madrid de gran parte de su familia, entre ellos sus nietos Álvaro y Plácido, que se alternan en la figuración de “Il postino”, la obra que él iba a representar en el Real hasta que se le declaró la embolia pulmonar que le ha tenido hospitalizado varios días, se marchará el día 29 y tiene previsto regresar “muy pronto”.
“Ya que no pude hacer estas cinco funciones -de “Il postino"-, me gustaría que mi próxima actuación en Madrid sea en la Plaza Mayor o en un lugar más grande y que venga toda la gente que quiera venir”.
Asegura que está “muy mejorado” de la embolia pero que aún tiene que ver cómo “funciona la respiración”.