Esta tecnología va a “incrementar la eficiencia de todos los procesos productivos de la economía para reforzar el beneficio que vamos a estar obteniendo en este mundo hiperconectado”, afirmó José F. Otero, vicepresidente para América Latina y el Caribe de 5G Américas.
Otero destacó que, como novedad, el 5G puede llevar una mejor conectividad y, por tanto, más crecimiento económico a las zonas rurales, algo en lo que varios países latinoamericanos ya trabajan.
“La llegada de nuevas tecnologías a las zonas rurales también empieza a crear oportunidad a comunidades remotas para comenzar a utilizar esas nuevas tecnologías que antes no tenían por el tema de la conectividad limitada”, aseveró.
La tecnología puede generar un salto en nivel productivo y su uso “traerá consigo soluciones innovadoras y que formarán parte de nuestro día a día”, afirmó Beatriz Cerrolaza, ingeniera de Telecomunicaciones. Según datos de la Cepal sobre el acceso a internet en América Latina, persisten las diferencias en el acceso entre las zonas rurales y urbanas, con un promedio de alrededor de 27 puntos porcentuales. Los países con las mayores diferencias son Brasil, México y Colombia.
DESAFÍOS. Los desafíos del despliegue de la nueva tecnología en la región son claves, entre los cuales Otero destaca la disponibilidad del espectro radioeléctrico, la distribución de la riqueza y el poder adquisitivo del consumidor.
Para Cerrolaza, la pandemia del Covid también causa un retraso considerable en la implantación de esta tecnología. En América Latina, donde casi la mitad de la fuerza laboral es informal y donde hay países donde los niveles de pobreza superan el 40%, Otero señala que en términos de implantación, esa coyuntura, sumada a la pandemia y sus consecuencias, lo hace “más lento” que en Europa. “Si uno no puede comer, no tendrá dinero para pagar nuevas tecnologías móviles”, explicó.
Entre los países de América Latina, fueron Brasil, Chile y Perú los que hicieron la mayor cantidad de pruebas y, según datos de 5G Américas, cinco redes 5G ya operan desde 2019. Uruguay fue el tercer país en el mundo en lanzar la tecnología, seguido en la región por Puerto Rico y Brasil, que comenzó la implementación del 5G este mimo mes, explicó Otero. Se espera que en los próximos 12 a 18 meses el despliegue se de en Colombia, México, Bolivia, y posiblemente Perú y Costa Rica.