El animal, que nació el pasado 14 de octubre, es atendido actualmente en el hospital faunístico de la entidad, cuenta con 41 gramos y goza de excelente estado de salud.
Según los datos, el pichoncito nació en un nido construido por un equipo operativo del CIASI y monitoreado por profesionales veterinarios con la ayuda de una cámara.
Este monitoreo se llevó a cabo debido a que la hembra poseía deformación del pico, llamado “pico de tijera” y existía la preocupación de que –por ese motivo– no pudiera alimentar adecuadamente a la cría.
El pasado viernes 16 de octubre se constató que la cría estaba menos activa y con el buche vacío. Esto indicaba que la madre no estaba pudiendo alimentarla, por lo que se decidió retirar a la ejemplar del nido y criarla artificialmente.
Con 14 gramos y 3 días de vida, se dio inicio al procedimiento, siendo mantenida el ave en una incubadora a 36 grados centígrados y alimentada cada 3 horas con una papilla especial de psitácidos.
Según los registros, es la primera vez en el CIASI que un pichón de gua’a es criado artificialmente, lo cual representa un gran logro para todo el equipo, según explicó la doctora Diana Pésole.
“A pesar del defecto físico del pico que poseía la madre, su valor reproductivo es altísimo, ya que fue la única hembra de la bandada que dio descendencia. Esperamos que el próximo año esta y otras puedan seguir dando crías al CIASI”, manifestó la profesional.