20 jun. 2025

Opinión pública

Derecho a réplica sobre deuda a la Municipalidad
El que suscribe, Enrique Jiménez Riera, CI 1.055.606, se dirige a Ud. A fin de ejercer derecho a réplica contra una publicación aparecida el día 17 de abril del corriente. En dicha publicación se mencionaba, primero, que sigo siendo funcionario municipal, cosa que es absolutamente falsa pues fui cesado arbitrariamente por la actual intendenta en fecha 19 de diciembre de 2007, tal cual ella misma lo reconoce ordenando el pago de la indemnización correspondiente por causa de despido injustificado, la cual hasta la fecha no me fue efectivizada, por lo cual he demandado a la Municipalidad de Asunción.
Luego, con total irresponsabilidad o mala fe, se menciona que adeudo a la Municipalidad la suma de G. 1.600.000, cosa absolutamente falsa. Al día de la fecha no debo suma alguna a la Comuna capitalina. Esperando se me conceda el derecho de réplica y se publique in extenso la presente nota, caso contrario tomaré las acciones judiciales correspondientes en salvaguarda de mi buen nombre y el de mi familia.
Enrique Jiménez Riera
Abogado

Enmienda para
el rekutu
La enmienda o reforma de la Constitucional nacional ha originado apasionantes polémicas y discusiones radiales, televisivas, en los cafés, clubes, cantinas, “ere eréa”, todos opinan, desde los infaltables llamadores hasta intelectuales, abogados constitucionalistas, distinguidos profesores universitarios, parlamentarios, líderes políticos pertenecientes al color carmesí, escarlata y verdolaga, pero curiosamente ninguno, ni uno solo de ellos, se dignó a argumentar ni en broma que el “rekutu” no corre por ninguno de estos medios –reforma ni por enmienda– por esta sencilla razón: La posición jurídica constitucional del mandamás actual está determinada por esta Constitución, que asigna un periodo perentorio de cinco años para todos los electos bajo su vigencia y, aún si se modificara, por enmienda o por reforma, no podría alterar la situación firmemente pre-establecida de los cinco años mencionados.
Caso contrario, sería crear un gobierno de facto, violando una prohibición absoluta de la Carta Magna. Toda ley, reglamento, decreto, ordenanza municipal y con más razón enmienda o reforma Constitucional son o deben ser exclusivamente para el futuro. No pueden de ningún modo tener efecto retroactivo. Elemental, por lo que llama la atención el motivo, razón o circunstancia por los cuales estos “intelectuales” en ningún momento mencionaron este argumento. Es mi opinión.
Claudio Pereira

Represor suelto en el TSJE
Amnistía Internacional publicó a fines de los años 70 desgarradores testimonios de las salvajes torturas a que fuera sometido Octavio Rubén González Acosta, carpintero empleado en la represa del río Acaray.
La Policía negó conocer a González Acosta ante los organismos internacionales de derechos humanos, pero años después en los Archivos del Terror aparecería un documento emitido el 6 de octubre de 1976, delatando que los sanguinarios verdugos habían mentido en su respuesta. En el informe, firmado por el comisario Alberto Cantero, se detallaba que Octavio Rubén era un “peligroso comunista” abocado a reclutar y adoctrinar en el “marxismo-leninismo” a los obreros de la represa hidroeléctrica ubicada en el río Acaray. ¿Se basaba acaso el jefe de la brigada policial, que abatió a tiros a Juan Carlos Da Costa, en los informes de Mochito?
Era, pues, el mismo tenor de los oprobiosos informes que abundan en los Archivos del Terror, como el del 15 de junio de 1985 en el que Mochito alertaba a su jefe, el mismísimo comisario Cantero, sobre la “infiltración marxista” en entidades bancarias. Probablemente con ese mismo argumento convenció al exitoso, cuando era su ministro de “Justicia y Trabajo”, de que debía sanear la banca nacional enviando a Calé, Juan Ernesto y otros de sus voceros a hablar por radioemisoras de la patria publicista de modo a crear pánico entre la gente, acudiendo todo el mundo en estampida a reclamar su dinero, esquema con el cual lograron dejar tanto a banqueros como ahorristas en la calle.
También se desempeñó como funcionario de la Cancillería en las etapas más sombrías de la represión, de 1961 a 1963. La Cancillería desempeñaba por entonces un papel clave dentro del aparato represivo, ya que existía en ese tiempo una activa participación de agentes de la CIA y militares estadounidenses en los centros de represión y tortura, “cooperación” que se daba en el marco de la guerra fría y que era tramitada por la vía del servicio exterior.
La “luminosa” carrera política de Morales no se detuvo y alcanzó su clímax en 1967, cuando se desempeñó como convencional constituyente. Aunque usted no lo crea estimado lector, el gran timonel de los procesos electorales en esta etapa definitoria de la dilatada transición, el servil y abyecto Mochito estaba allí esa histórica mañana del 26 de mayo de 1967 para ovacionar al general Alfredo Stroessner como si se tratase de una estrella de rock.
¿Acaso no estaban también allí, batiendo rabiosamente sus palmas, otros grandes héroes de esta transición democrática como Carlos Alberto González, Juan Carlos Zaldívar, Rodrigo Campos Cervera o José Félix Fernández Estigarribia?
Luis Agüero Wagner

Sobre el fraude
en el MEC
Evidentemente estamos llegando al colmo de la corrupción, de la avaricia, de la ambición desmedida de ciertos personajes corruptos, ladrones y sinvergüenzas de este país, pues jugar con la salud de nuestros niños y niñas, inocentes, que no pueden defenderse aún, ya no tiene definición, no tiene perdón.
La Red de Contraloría Ciudadana del Paraguay (RCCP) manifiesta enfáticamente su mayor indignación por este nuevo hecho sin explicación, e insta a las autoridades pertinentes a la aplicación de la mayor pena legalmente posible a tales bestias de nuestra sociedad. No merecen ser parte del Paraguay y mucho menos tener algo que ver con los niños y niñas de nuestro país.
¿Hasta cuándo las autoridades del Paraguay electas por el pueblo harán lo que quieren y no lo que deben?
¿Dónde está la ciudadanía paraguaya, que no levanta su voz de protesta demandando del gobierno lo que la Constitución nacional les ofrece por derecho?
Mientras reinen la apatía en la ciudadanía y los malos gobiernos, el Paraguay seguirá siendo un país del chiste y no serio… nada confiable.
Rodolfo Troche Rasmussen
Por la Red de Contralorías
Ciudadanas del Paraguay