08 feb. 2025

Opinión pública

Navidad, ¿dónde estás?
Recuerdo de chiquita que íbamos en familia a visitar los pesebres de los vecinos, donde nos regalaban caramelos y dulces.
Recuerdo que las reuniones familiares eran más frecuentes y que ese abrazo a la medianoche era algo mágico.
Recuerdo que miraba a las personas y veía ojitos brillantes esperando la Navidad...
Hoy reflexiono y recuerdo que eso era así porque entonces no existían familias separadas por un océano, a causa de la falta de capacidad de los gobernantes de administrar el país.
Tampoco existían familias gritando justicia a un desastre nacional, mientras esos supuestos defensores de la ley se pasan jugando tenis con el pueblo. No existían familias suplicando atención a sus males en esos lugares que se dicen llamar hospitales “públicos”.
Hoy recuerdo al Paraguay que una vez fue feliz. Dentro de 10 años, ¿qué es lo que podremos recordar?
La Navidad llegó y no existe esa sonrisa y felicidad sinceras; no existe esa esperanza de renacer, de que “todo podrá cambiar"…
Paraguay, ¿qué te han hecho? Paraguay, ¿dónde escondes a la Navidad?
Sabrina Thies
2.267.657

Sobre Fondec
Por este medio quiero contarles que la bancada de Patria Querida y País Solidario, en la plenaria de Diputados, votaron en abstención. En tanto diputados liberales y colorados de la Cámara de Diputados, juntos y revueltos, votaron por una consejera del Fondec, quien ya en el 2003 había accedido al cargo por influencias partidarias familiares, sin cumplir los recaudos legales; y ahora hizo el rekutu.
Observé la sesión, donde, a pesar del cristal separador, hedía el olfato y lagrimeaban los ojos por el humo de la cocinada. Se habían hecho paquetes de negociaciones con varios cargos, y entre ellos se incluía la permanencia de la hermana de los diputados liberales, defendida por el propio Blas Llano, a quien no le sonroja la vergüenza, porque no se ha perdido por la cultura, pero argumenta como si algo supiese, en tanto sostiene su pálido liderazgo a punta de prebendas y cargos a sus leales, aun durmiendo con el enemigo.
Como en muchas ocasiones, en estos años de papel de la transición paraguaya me sentí humillada como ciudadana y como mujer inclaudicable de la cultura y de las luchas por las igualdades en el Paraguay, cuando vi votar a los colorados y a los liberales juntos, demostrándome que también en el sagrado ámbito de la cultura se realizan meriendas de negros. Confirmándome una vez más que en este país no cuentan: ni la idoneidad, ni la honestidad, ni la productividad, ni la trayectoria. Como en el tango de Discépolo, el “Cambalache": ¡No hay aplazados, ni escalafón! En tanto la ciudadanía paraguaya va a Madrid o a Nueva York. Y el último que salga... que apague la luz del Congreso.
Al igual que la abstención de los partidos dignos, también mi postulación fue testimonial. Para testimoniar: que no se vota a conciencia, ni para el bien de la comunidad a la cual se representa, sino para convertir en cuotaje partidario, en magro botín de piratas de la buena fe ciudadana hasta los espacios destinados a elevar la vida cívica y cultural de nuestro pueblo.
Ese no fue jamás el espíritu que nos llevó a la Comunidad Cultural a promover la creación del Fondec. Otorgando al Congreso la potestad de los nombramientos se pretendió salvaguardar el espacio de un eventual prebendarismo del Ejecutivo, pero ¡henos aquí! que fue peor el remedio que la enfermedad: el Consejo es coto de caza de colorados y liberales, partidos –salvo excepciones– con pocas personas relevantes vigentes de la cultura en sus filas.
Dichos (diputados liberocolorados), quienes ni siquiera han aprendido a leer un currículo o una hoja de vida profesional y política, no podrán comprender jamás una trayectoria de lucha honesta e inclaudicable por el bien del país y de su gente.
Reconozco a la gente que hace política de forma distinta, y me permito hacer reflexionar con la ciudadanía que será posible una Concertación, Alianza o Frente Amplio en Paraguay, con los nuevos partidos políticos y movimientos sociales y culturales, y la ciudadanía que quiere un cambio real, donde la igualdad de oportunidades y la equidad sean una realidad viva, alejada de las componendas de los partidos tradicionales, que con sus centenarias tradiciones, en los hechos, muestran que son responsables de esta larga transacción, que tanto daño nos hace a los paraguayos y paraguayas de bien.
Raquel Rojas

Deseos de Navidad para el Paraguay de un ajedrecista
Espero que la Navidad traiga alegría a todos los hogares paraguayos. Que la Nochebuena sea la noche que la gente desea y que todos los sentimientos buenos se unan para convertir esa noche en la más especial de todas.
Al mismo tiempo, deseo que el año 2007 depare a las familias de todo el país solo alegría y felicidad. De no ser así, en algún momento deseo que encuentren la fuerza necesaria para levantarse de nuevo y seguir adelante, a fin de que sus proyectos de vida se hagan realidad.
Deseo también un año 2007 donde se apueste por la Honestidad y la Solidaridad como factores determinantes de una sociedad con mejor futuro.
Y, por supuesto, deseo que siempre disfruten de un buen juego de ajedrez, para compartir un rato de integración sin distinción de creencias, ideologías políticas, condiciones sociales, color, etc. Solo compartiendo un momento de libre pensamiento entre seres humanos.
Quisiera encontrar palabras más adecuadas, pero solo puedo decirles que estoy muy agradecido por el camino que me ha tocado y por el momento en que, recorriendo ese camino, he tenido el gusto de poder escribirles este mensaje de Navidad de un ajedrecista.
Con afecto,
Mirko Rojas Bravo