Mario José Mareco Silvera, condenado a 28 años de cárcel, tiene prisión domiciliaria en Asunción. La resolución dice que puede asistir a su tratamiento médico. La abogada Antonia Portillo prestó fianza personal por G. 500.000.000 y fianza real por G. 2.688.000.000.
Una junta médica determinó que padece una enfermedad cardiaca crónica y alteraciones del medio interno, diabetes y dislipemia, y recomendó su tratamiento fuera del penal.
Su padre, José Domingo Mareco Galeano, condenado a 11 años en la misma causa, también tiene prisión domiciliaria concedido por la jueza Scura, con recomendación de una junta médica.
CON ARRESTO. Además, Ulises Jorge Cardozo, procesado por lavado de dinero para la supuesta estructura del tráfico aéreo del narcotráfico, tiene arresto domiciliario.
La jueza de Ejecución, Lourdes Scura, el 30 de enero pasado concedió el pedido de tutela jurisdiccional, donde le dice a su colega Humberto Otazú, que debe realizar la revisión por el grave estado de salud de Cardozo.
Como Otazú estaba de vacaciones, la jueza Lici Sánchez estudió la revisión y lo rechazó. No obstante, por nota firmada por el encargado de despacho del penal ovetense, Blas Augusto Martínez, se concedió el arresto domiciliario, supuestamente por orden de la jueza Scura. Cardozo fue entregado a su abogado Filemón Meza. El juez Otazú intimó al director de Institutos Penales a que informe si el mismo está o no preso.