La cantidad de trabajadores que siguen con contratos suspendidos a causa de la pandemia de Covid-19 disminuyó considerablemente y se redujo a 2.929 empleados formales que están bajo este régimen, según datos suministrados por el Ministerio de Trabajo. Los afectados con esta medida siguen percibiendo el subsidio correspondiente a la mitad del salario mínimo legal a través del Instituto de Previsión Social (IPS). Esto demuestra, en cierta medida, que la actividad económica de los diversos sectores de producción de bienes y de servicios, de todo el país está volviendo a la normalidad tras la disminución de contagios y muertes a consecuencia del virus. No obstante, las autoridades gubernamentales instan a la ciudadanía a seguir cumpliendo el protocolo sanitario para evitar una nueva ola de la enfermedad.
El gobierno había recurrido a la figura de la suspensión laboral como una medida para que las empresas no despidan a sus empleados, después de que se vean imposibilitada de pagarles, debido a la larga cuarentena a causa del Covid-19. Esta medida, si bien sirvió para evitar el despido masivo de trabajadores, también se prestaron a abusos de parte de algunas empresas que fueron denunciadas por haber violado el mandato obligando a sus colaboradores a seguir trabajando a pesar de estas suspendidos.
En cuanto a la continuidad del pago del subsidio, el IPS solicitó a Hacienda la transferencia de USD 24 millones para seguir pagando a los suspendidos.