Desde el pico de exportaciones, las cargas con destino a Chile se redujeron a 9.469 toneladas en julio pasado, siendo que un año antes los volúmenes ascendían a 14.024 toneladas. La industria mejoró el desempeño en agosto con el envío de 11.910 toneladas al mayor cliente de la carne local, de acuerdo con los datos desagregados del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa).
Igualmente, significa un menor volumen respecto al mismo mes del año pasado, cuando se transportaron vía terrestre 13.070 toneladas al país trasandino. En cambio, hay una variación positiva y sostenida en los valores obtenidos en la comercialización.
Este aspecto se evidencia sobre todo en las cifras acumuladas al octavo mes que arrojan un precio promedio de USD 5.552 por tonelada, que representa un incremento de 8,9% con relación al 2021.
Casi el 40% de las 238.473 toneladas de carne exportadas hasta agosto fueron a Chile, mientras que los demás países de la región vendieron al mismo destino apenas entre 1% y 3,8%. De esta manera, Brasil, Argentina y Uruguay prefieren aprovechar la apertura del mercado chino, que les compra entre el 52% y 76,7% de su stock exportable a un buen precio, de acuerdo con los datos de la Asociación Rural del Paraguay al cierre de julio.
Para empujar los precios al alza, la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne recomienda a sus socios retener los animales en sus establecimientos ahora que el clima permite, a fin de que los frigoríficos se vean obligados a pagar más.
La mayor venta de carne al mercado chileno se registró en abril pasado, con más de 15.000 toneladas, pero desde entonces los volúmenes descendieron, según informes del Senacsa.