La visita empezó con mal pie, cuando Trump, a punto de embarcarse hacia Londres, cuestionó precisamente el plan para el brexit de la primera ministra británica Theresa May por considerar que no es lo suficientemente rupturista con la Unión Europea.
“No sé si votaron por eso”, dijo Trump en una rueda de prensa en Bruselas. “La gente votó para separarse (de la Unión Europea), así que me imagino que eso es lo que harán, pero tal vez tomen un camino diferente”, dijo Trump.
En el primer acto oficial, una cena con empresarios en la mansión de Blenheim, cerca de Oxford, donde en 1874 nació Winston Churchill, May pronunció un discurso en el que formuló la demanda.
“De Maine a Alaska, más de un millón de estadounidenses trabajan para empresas británicas. Ahora que nos preparamos para dejar la Unión Europea, tenemos una oportunidad sin precedentes para hacer más”. “Es una oportunidad para alcanzar un acuerdo de libre comercio”, sentenció May. afp