“Más de 50.000 refugiados ucranianos huyeron de su país en menos de 48 horas, la mayoría en dirección de Polonia y Moldavia- y muchos otros se dirigen hacia las fronteras”, tuiteó Grandi, que el jueves dio parte de unos 100.000 desplazados internos en Ucrania a causa del conflicto.
Grandi también agradeció “calurosamente los gobiernos y ciudadanos de los países que dejan sus fronteras abiertas y acogen a los refugiados”. Los ucranianos huyen también a Hungría y Rumania.
En otro tuit, agradeció particularmente la presidenta moldava, Maïa Sandu, por “haber permitido a las personas que huyen de Ucrania de atravesar en toda seguridad la frontera con Moldavia” y le aseguró que Acnur “hará todo lo posible para ayudar a movilizar la ayuda internacional mientras los recibe y acoge”.
Rusia inició su invasión de Ucrania este jueves de madrugada, con bombardeos en todo el país, incluida Kiev, la capital.
El viernes, la ciudad era escenario de feroces combates entre las fuerzas invasoras rusas y el ejército ucraniano, al que Vladimir Putin llamó a tomar el poder.
INCERTIDUMBRE. Por otra parte, el jefe de la oficina humanitaria de la ONU, Martin Griffiths, destacó este viernes que en sus 45 años de carrera profesional nunca ha visto el nivel de incertidumbre que se está registrando en Ucrania, lo que está dificultando los preparativos de ayuda para los ucranianos.
“He pasado 45 años lidiando con conflictos por todo el mundo. (...) Nunca he visto una situación así en cuanto a planes de contingencia”, apuntó Griffiths en una rueda de prensa ofrecida en la sede central de Naciones Unidas, en la que recordó que ha trabajado en crisis en Iraq, Camboya, Yemen, Siria o Afganistán, entre otros.
“Los planes de contingencia por lo que pueda o no pueda pasar en Ucrania tienen el mayor grado de incertidumbre”, afirmó el subsecretario general de la ONU.
Griffiths señaló que de momento la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés) está diseñando un plan de acción de tres meses, y explicó que con el paso de los días se irá viendo si es necesario extender o acortar ese periodo de tiempo.
Aunque dijo que aun no se tienen cifras sobre la cantidad de personas que van a necesitar ayuda, sí que recordó que ya antes del conflicto unas 3 millones de personas necesitaban asistencia en el país. “Incluso antes de los eventos recientes, ha habido un conflicto en el este de Ucrania desde hace ocho años, y eso significa que tres millones de personas ya necesitaban ayuda”, declaró Griffiths