Las declaraciones del mandatario fueron vertidas en Palacio de Gobierno, en el momento de reflexionar sobre el Marzo Paraguayo.
Primero consideró que es una fecha simbólica donde habitualmente las autoridades del Gobierno reciben reclamos de diferentes sectores sociales y campesinos.
Recordó que la crisis del Marzo Paraguayo del año 2017, que concluyó con la quema del Congreso fue un momento en que “se puso a prueba la democracia paraguaya y la institucionalidad de la República por ambiciones desmedidas e ilegítimas no solamente de un sector, sino de dos sectores políticos que se unieron”.
Marito dijo que ciertos sectores internos de su partido (cartismo) cuestionan acuerdos con otros sectores.
“Ellos (cartismo) hicieron acuerdos que derivaron en el luto y en el intento de la destrucción de la institucionalidad de la República y en la quema de un símbolo de la democracia y la representación que es el Congreso”, arremetió el presidente.
violar la cn. El sector de Honor Colorado había pactado con el Frente Guasu, liderado por Fernando Lugo, y el llanismo para forzar la enmienda para incluir la figura de la reelección presidencial. Terminó el 31 de marzo del 2017 con la quema del Congreso y el atraco de la sede del PLRA donde asesinaron a Quintana. Refirió que sus correligionarios muchas veces cuestionan cuando se hacen acuerdos para aprobación de leyes o designar un ministro.
“Pero ellos hicieron acuerdos con estos dos sectores, principalmente uno, que tanto critica cuando se dialoga”, sostuvo.
Sin embargo, insistió que este sector no tuvo problemas para violar la Constitución por ambiciones desmedidas que llegó a un trágico suceso con la muerte del joven liberal. Insistió en que espera que este episodio sirva para comprometer a no repetir la historia. Sostuvo que es importante fortalecer la conciencia democrática y que “nadie puede estar por encima de la ley”.
“Nadie puede atropellar las instituciones de la República”, significó el presidente de la República.
El claro mensaje que golpea las entrañas del cartismo, se da a pocas semanas de las elecciones generales.
Mario Abdo se mantiene distante de la campaña presidencial de Santiago Peña (candidato del Partido Colorado). Además sigue la presión sobre Cartes, declarado significativamente corrupto por Estados Unidos y sancionado económicamente.
Un sector del Partido Colorado está preocupado porque hasta el momento no consiguió el crédito para solventar la campaña electoral. Ningún banco se anima hasta ahora a conceder el préstamo a la ANR.
Se puso a prueba la democracia paraguaya y la institucionalidad de la República por ambiciones desmedidas e ilegítimas.
Ellos (cartismo) hicieron acuerdos que derivaron en el luto y en el intento de la destrucción de la institucionalidad
Mario Abdo Benítez,
presidente de la República.