Por Carlos Marcelo Aquino
TACUATÍ
Por más de 6 décadas los integrantes de la familia Torres, en el distrito de Tacuatí, ocuparon la intendencia de este pequeño distrito, ubicado a orillas del río Ypané, entre el límite de San Pedro y Concepción. Sin embargo, la situación comienza a cambiar en la zona.
La sorpresa se registró en las últimas elecciones municipales, donde contra todos los pronósticos, el candidato Antonio Torres, por el Partido Colorado, fue derrotado por un liberal, el joven Orlando De Vacca, que de esta manera se convierte en el primer intendente municipal de esta comunidad que no lleva el apellido Torres y que además es de un partido diferente al Colorado.
En la zona, la familia Torres es conocida por el fanatismo hacia el “stronismo”, así como también por sus actitudes prepotentes, sobre todo en la época de la dictadura, durante el mandato del presidente Alfredo Stroessner (1954-1989). Incluso, según los pobladores, mediante esa situación los Torres lograron amasar grandes fortunas, principalmente adquiriendo tierras y copando todas las instituciones públicas del distrito.
PUESTOS. Los miembros de esta familia ocupan cargos en todos los niveles; desde la dirección de la agencia de Autores Paraguayos Asociados (APA) hasta la administración del polideportivo construido en este lugar por la Diben.
El intendente saliente es Salvador Torres, hermano del candidato que perdió las últimas elecciones, Antonio Torres, quien ya fue intendente en dos ocasiones anteriores.
Por otro lado, la jueza de paz, Ninfa Torres de Ramos, es sobrina del intendente saliente; al igual que la supervisora zonal, Noemí Torres. Aníbal Torres (también hermano del intendente saliente) es el titular de la agencia de APA, y la Copaco está a cargo de Ramona Torres. La lista continúa: la directora de colegio es Benicia Alonso de Torres, mientras que el director es Ángel Darío Ayala, pariente político de los Torres.
Un miembro de la familia también ocupa un cargo en Senacsa y hasta el jefe de comisaría, que se jubiló hace unos meses y estuvo como jefe durante 25 años, es un Torres.
REACCIÓN. Esta situación lentamente fue colmando la paciencia de los pobladores de Tacuatí, quienes vieron que el cambio podría ser beneficioso en la zona, comenta Roberto González, un vecino del lugar.
El resultado de las elecciones fue inesperado y –a decir de González– “ni los mismos Torres podían creer que después de 60 años en el poder pudieran perder. Fue una reacción” –dijo– agregando que la gente optó por una propuesta diferente en la figura de un liberal.