Por Rodolfo López
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Los representantes paraguayos en la Copa Libertadores de América juegan esta semana los últimos partidos de local en la fase de grupos. Cerro Porteño recibe mañana la visita de Deportes Tolima, y Libertad hace lo propio el miércoles ante América de México.
La situación de los equipos compatriotas no es la misma, pues el Gumarelo con un empate pasa a los octavos de final, faltando todavía un partido por jugar y que será ante Banfield, en Buenos Aires. El Ciclón debe ganar, para luego esperar el desenlace en Porto Alegre, frente al Gremio.
Con el panorama que se presenta, tanto Cerro Porteño como Libertad necesitan el respaldo y el apoyo de todos, fundamentalmente de la hinchada. Ambos conjuntos están en instancias decisivas por seguir en la competición, aunque al albinegro le falta un punto –en cualquiera de los dos partidos– para conseguir el primer objetivo.
El azulgrana va por otro triunfo, pero esta vez ante Deportes Tolima, equipo con el que había caído en su visita por tierras colombianas. El repunte en su producción y más todavía su buen andar en el campeonato local hacen que las esperanzas se acrecienten, horas antes del crucial compromiso. El Ciclón utilizará el Defensores –la Olla está inhabilitada– y hasta allí tienen que llegarse sus seguidores para dar el gran aliento. Pasado mañana es el turno liberteño y debe ocurrir lo mismo. El fútbol paraguayo necesita hacerse sentir en el campo internacional, y a nivel de clubes está en manos de Cerro Porteño y Libertad.