Durante el 2006, año en el que Shakira se consagró como una estrella mundial, también hubo otros artistas latinos que brillaron con luz propia.
Este año el mundo latino vio el resurgimiento de dos grandes estrellas que habían dejado de lucir hace un buen tiempo: Ricky Martin y Maná.
En el caso del cantante puertorriqueño, volvió al candelero con su nuevo disco ''MTV Unplugged’’, en el que combinó algunos de sus grandes éxitos como “Perdido sin ti”, “Vuelve” y “La bomba”, con tres canciones inéditas. El astro latino volvió a causar furor entre una audiencia que no había respondido con tanto entusiasmo sus últimos dos discos, ''Life’’ y ''Almas del silencio’’.
A la par, el puertorriqueño fue galardonado como Persona del Año por la Academia Latina de la Grabación por su activismo contra la explotación y el tráfico infantil.
Maná, por su parte, llevaba cuatro años sin grabar y regresó con ímpetu con ''Amar es combatir’’, para colocarse en las listas de los discos más vendidos de México y Estados Unidos la semana de su lanzamiento. En Suiza la banda alcanzó un disco de oro por 50.000 copias vendidas.
Julieta Venegas, Paulina Rubio y Alejandro Sanz también estuvieron en la mira con sus respectivos álbumes, ''Limón y sal’’, ''Ananda’’ y ''El tren de los momentos’’, respectivamente, los cuales en poco tiempo saltaron a las listas de popularidad de los países de habla hispana.