Las expectativas para la economía en el 2007 son menos auspiciosas debido al menor crecimiento esperado para las economías de la región. Se esperan además rendimientos productivos de los principales rubros agrícolas de exportación similares o menores a la campaña 2005/06, por problemas climáticos más que de precios internacionales.
Según expresó Borda, la tasa de cambio sobrevaluada que desalienta la producción y exportación, además de la reducción del comercio de reexportación.
Se calcula que habrá menor tasa de inversión privada ante la incertidumbre política y el deterioro de la gobernabilidad, aunque se mantiene el nivel de consumo de la población por el aumento de los gastos del Gobierno, tanto los rígidos (salarios) como los gastos de capital (aumento sustantivo de obras públicas por uso de diferentes fondos externos disponibles), y el envío de remesas.
Se mantiene el mismo nivel inflacionario por presión de la demanda agregada, pero con un deterioro de las cuentas públicas que puede resultar en déficit fiscal (aumento importante de los gastos contra reducción o estancamiento de los niveles de ingresos tributarios).
Las reformas del sector público están estancadas: sin mejoras del servicio civil en el servicio de empresas públicas.