El propietario de una farmacia ubicada en Capiatá denunció que fue víctima de un violento asalto en su propio local, por parte de tres sujetos, y fuedespojado de 23 millones de guaraníes, entre efectivo y medicamentos, a más de su automóvil. Se trata de Leoncio Eleuterio Irala Fernández (52), dueño de Fleming.
El hecho aconteció el miércoles último, en la farmacia Fleming, ubicada sobre el kilómetro 18 y medio de la ruta II, en la ciudad de Capiatá. Resultaron víctimas. el propietario Eleuterio Irala Fernández y su cuñada Mariela Brítez (18), quien también trabaja en el lugar.
Explicó que las 16 llegó un joven simulando ser un cliente y preguntando por unos medicamentos. Mientras estaba con el presunto interesado, ingresaron al lugar dos sujetos más, uno de ellos con una bolsa grande; los tres ya con arma de fuego en mano, gritando que era un asalto.
“Me rompió la camisa y me apuntó con una pistola en la cabeza y me dijo que era un asalto, pidió la llave de mi auto, la plata y el celular”, indicó la víctima sobre uno de los delincuentes. Refirió que los asaltantes los maniataron con cinta de embalaje y luego los empujaron al baño.
“A mi cuñada le agarró un shock nervioso y nos dijo uno de los asaltantes: ‘Un llanto más y les liquido’”, recordó el farmacéutico.
Al ser consultado sobre el perjuicio, respondió: “Llevaron medicamentos, pilas, relojes, tarjetas para celulares, cosas de escritorios, pañales desechables, preservativos, chicles, todo lo que había y tres millones de guaraníes”.
Asimismo, los delincuentes se llevaron el rodado de la víctima, un vehículo Toyota Corona, color rojo, modelo 96, chapa AET 427, a más de una serie de documentos.
Los asaltantes estuvieron aproximadamente 10 minutos en el sitio y no fueron divisados por nadie, ni por la Policía, pese a que es una zona muy transitada. Los uniformados llegaron al lugar 30 minutos después, puntualizó la víctima.
“Me presionan para recuperar lo mío”
El calvario de Eleuterio Irala no terminó esa tarde. Horas depués,, a eso de las 23, recibió en su línea baja un llamado, donde un anónimo le indicaba que debía pagar un rescate por su auto.
“Me presionan para que deposite a nombre de una persona cinco millones de guaraníes, para recuperar mi vehículo”, explicó.
“Intenté negociar a mi modo y me dijo el maleante, ´tengo 15 años de experiencia, lo que te planteo tiene que ser como yo digo´”.
Lamentó el robo de su vehículo, diciendo que lo había terminado de pagar hace dos meses.
“No le deseo ni a mi peor enemigo lo que pasó”, expresó. Refirió que no pudo dormir las dos noches, luego del robo, por el temor y la impotencia que siente.
Manifestó que su cuñada ni siquiera quiere volver a cruzar por enfrente de la farmacia.