“El gran cambio observado durante la pandemia es claramente el cierre generalizado de los campus a nivel internacional y una transición hacia la enseñanza a distancia, con una gran heterogeneidad en las respuestas aportadas y los niveles de preparación”, explica a la AFP Mathias Bouckaert, analista en la OCDE y especialista de cuestiones universitarias.
“En algunos países, la enseñanza en línea ya se practicaba, como en Canadá, donde los inviernos rigurosos hacen a veces imposibles los desplazamientos. En otros países como en Turquía, donde la ley imponía un nivel importante de enseñanza presencial, estas prácticas eran mucho menos corrientes”, señala. Aunque la enseñanza a distancia ha funcionado bien en ciertos países, como Canadá, en otras regiones del mundo, mucho menos, como en África.
En Kenia, el acceso a internet y a los ordenadores es uno de los principales problemas. La pandemia no sólo ha transformado la enseñanza en los jóvenes, también se han quedado sin vida estudiantil. AFP