El Ministerio de Economía, que lidera el también candidato presidencial Sergio Massa, anunció una serie de medidas que la UIA considera que limitan “aún más el acceso a insumos necesarios para la industria” y dijo que espera que sean “de carácter transitorio”.
Los anuncios “afectarán la actividad, con fuerte impacto en las pymes (pequeñas y medianas empresas), a partir de una mayor presión fiscal al sector productivo, mayores costos y pérdida de competitividad para la exportación”, afirmó la mayor patronal del país.
Y advirtió que “resulta fundamental evitar el sesgo antiexportador y las distorsiones de precios que generan estos esquemas que impactan aleatoriamente en las cadenas de valor”.
“Dólar agro”. El Ministerio de Economía ideó un paquete de medidas tendiente a aumentar las reservas, entre las que sobresale un nuevo “dólar agro”, con el que las autoridades esperan recaudar USD 2.000 millones, que supone aplicar un valor de 340 pesos a las exportaciones regionales, que incluyen productos como sorgo, cebada, girasol y maíz hasta el 31 de agosto.
“Dólar solidario”. Para evitar la pérdida de reservas, el Gobierno argentino decidió la generalización del impuesto país del 7,5% para todas las importaciones –excepto medicamentos, combustibles, lubricantes, bienes vinculados a la generación de energía, además de insumos y bienes intermedios vinculados a la canasta básica alimentaria, que seguirán sin pagarlo– y el encarecimiento del precio del “dólar solidario” (tributo que grava la compra de divisa para su ahorro). La UIA advirtió que la medida sobre las importaciones se aplica sobre las pautadas con anterioridad generando “costos retroactivos” y un “quiebre en la cadena de pagos” de los sectores afectados, en tanto aún “no se conoce” el alcance de las excepciones del impuesto país.
La entidad alertó que no se ha contemplado eximir de ese impuesto a los insumos y bienes intermedios de los productos incluidos en los controles de precios oficiales.
Encarecimiento. Además, la industria explicó que la medida encarece los fletes internacionales, por lo que “afecta la competitividad de las exportaciones” argentinas.
El paquete de medidas económicas fue anunciado en el marco de una negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para cambiar ciertos términos del acuerdo de refinanciación de la deuda de USD 44.000 millones firmado en 2022 y evitar que el vecino país, con severos desequilibrios macroeconómicos, entre en mora.
La UIA destacó que Argentina “debe contar con un plan macroeconómico a mediano y largo plazo” y que resulta “muy importante” lograr un acuerdo con el FMI que dé previsibilidad a los compromisos externos y a la administración de las reservas internacionales.
Argentina sufre serios desequilibrios macroeconómicos; además, padeció durante el primer semestre los efectos de una severa sequía que impactó de lleno en sus exportaciones agrícolas, su principal fuente de ingresos.