Este crecimiento se explica por una base de comparación baja, ya que en julio del 2020 la actividad económica aún estaba muy afectada por las fuertes restricciones sanitarias impuestas a finales de marzo del año pasado por el gobierno de Alberto Fernández ante la irrupción de la pandemia del Covid-19.
Por otra parte, el dato divulgado ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), que sirve como anticipo provisional para medir la variación trimestral del producto interno bruto (PIB), muestra que en julio la actividad económica creció el 0,8% en comparación con junio, sumando dos meses consecutivos en positivo, tras el estancamiento registrado entre febrero y mayo. En los primeros siete meses del año, la actividad económica acumuló un alza del 10,5%.
El informe del Indec revela que de 16 actividades incluidas en el indicador, 14 sectores productivos arrojaron mejoras interanuales en el séptimo mes del año. De acuerdo con los datos divulgados, los sectores que mostraron mayores magnitudes de subida fueron la pesca (251,6%) y la actividad de hoteles y restaurantes (55,4%).
La industria manufacturera, con un alza del 12,7%, fue el sector económico de mayor incidencia positiva en el nivel general de la actividad económica en julio, seguido por el comercio (12,5%).
En tanto, los dos sectores que mostraron un desempeño interanual negativo fueron el financiero (-1,3%) y el agropecuario (-3,6%). EFE
