Debido al cambio de gobierno, en los siguientes tres meses no habría mucha demanda de créditos, puesto que todos los actores económicos estarán expectantes a las modificaciones que pudiera haber en el ámbito económico, como nuevas medidas en el ámbito tributario, resalta el informe sobre la encuesta de situación del crédito del Banco Central del Paraguay (BCP), correspondiente al segundo trimestre de este año.
La presentación se realizó ayer en conferencia de prensa por Miguel Mora, economista jefe; Bernardo Rojas, director de Estadísticas Macroeconómicas; y Lourdes López, jefa de la división de Cuentas Monetarias, Financieras y Fiscales.
“Por el cambio de gobierno normalmente se rezagan las obras principales”, expresó Rojas, alegando que podría tratarse de una de las causales de la disminución de los empréstitos. Asimismo, alegó que los bancos esperan que se dinamice el crédito en el segundo semestre “cuando se normalice el mando”.
Vale señalar que en el segundo trimestre de este año, la encuesta tuvo un porcentaje de respuesta del 96,5%, de los cuales el 60,7% corresponden a bancos, el 32,1% a empresas financieras y el 7,2% a otras entidades de crédito, según la banca matriz.
De acuerdo a los datos recabados en la encuesta, el 71,4% de las personas encuestadas respondieron que la coyuntura económica es óptima para otorgar créditos, indicador que mantiene su tendencia de crecimiento desde el cuarto trimestre del 2016, después de la fuerte disminución observada durante los años 2015 y los primeros tres trimestres del 2016.
Resalta que, en general, las expectativas para la concesión del crédito se mantienen favorables, permaneciendo en la zona de expansión. El aspecto más resaltante para conceder crédito sigue siendo el económico y, por otro lado, los factores que pueden impedir una mayor concesión son la falta de información del cliente, historial del cliente, proyectos no rentables y escasa garantía por parte del prestatario, entre los más importantes.
Desde la visión de los tomadores de créditos, reiteradamente mencionan que existen requerimientos muy complejos para el otorgamiento del crédito, mucha burocracia y que la tasa de interés de los préstamos es muy elevada.
Asimismo, históricamente señalan que el motivo que dificulta la concesión de préstamos a largo plazo es principalmente la escasez de depósitos de largo plazo. Además, y de una forma recurrente, la mayoría de los encuestados señalan que observan muchas diferencias en los requisitos normativos para la concesión de créditos entre las entidades financieras reguladas y las no reguladas por el BCP. Consideran que las no reguladas poseen ventajas competitivas en cuanto a costos financieros, exigencias de capital y normas crediticias.
Por otro lado, los expertos explicaron que el tope a las tasas de tarjetas de crédito no afectó a los créditos otorgados con este instrumento.