La Corriente Sindical Clasista (CSC) sentó postura de categórico rechazo ayer sobre el acuerdo consensuado de un proyecto de ley para trabajo a tiempo parcial firmado por las centrales sindicales la CNT, CPT, CGT y CUT con los gremios de empresarios UIP, Feprinco, ARP bajo la coordinación del Ministerio del Trabajo.
Sostienen que de ninguna manera este proyecto estaría generando más puestos de trabajo, principalmente, para los jóvenes, y que se garanticen los beneficios sociales, como argumentaron en la presentación.
El comunicado sostiene categóricamente que la CSC “rechaza categóricamente este proyecto de ley”.
Argumenta esta postura en el hecho de que la Constitución establece que “el trabajador tiene derecho a disfrutar de una remuneración que le asegure a él y a su familia una existencia libre y digna, con el derecho a organizarse en sindicato y la negociación de un contrato colectivo de condiciones de trabajo que le permitan mejorar su beneficio social y económicamente”, pero que con el proyecto en cuestión no se cumplirán.
Agrega que la iniciativa legal “podría generar mayor desempleo, porque el empleo parcial facilitaría a los empresarios una mayor explotación al trabajador donde se realizará el trabajo forzoso de mayor producción en menos tiempo, que es el objetivo principal de los empresarios firmantes de este acuerdo”.
Asimismo, la CSC considera que el empleo parcial generará mayor precarización y flexibilización laboral, “que sintetiza la mayor explotación y el trabajo esclavizante, donde el patrón tiene las herramientas legales para generar su mayor ganancia”.
Igualmente, afirma que las citadas centrales obreras y sus dirigentes, “una vez más a espaldas de los trabajadores, fueron a firmar la entrega de los derechos laborales, lo que rechazamos y repudiamos”.
El referente del nombrado sector sindical, Eduardo Ojeda, dijo ayer a ÚH que van a sentar postura en el Parlamento para que este proyecto de ley sea rechazado.
Indicó que ahora convocarán a toda la clase obrera y los trabajadores a “reorganizarse para enfrentar las políticas antipopulares de flexibilización laboral, privatización y saqueo del sistema jubilatorio y la situación humillante a los asegurados del IPS”.