16 feb. 2025

Julio González marca otro gol por la vida

El delantero paraguayo del Vicenza entregó en donación a la casa de la divina providencia “San Ricardo Pampuri” parte del premio “Giacinto Facchetti - Il Bello del Calcio”, que le otorgó el diario La Gazzetta dello Sport.

Por Ariel Ramírez
aramirez@uhora.com.py
Un accidente de tránsito lo marcó, pero como él mismo lo define, para ver en forma diferente la vida.
Hace un año, en la madrugada del 22 de diciembre de 2005, Julio González Ferreira sufrió un grave accidente, mientras manejaba con destino al aeropuerto de Venecia, en compañía del argentino Gerardo Grighini –su compañero de equipo–, a que llevaba para que tome el vuelo hacia su país y pasar las fiestas. El percance lo tuvo al borde de la muerte y obligó a los médicos a amputarle el brazo izquierdo, mientras su compañero, Grighini, no sufrió mayores complicaciones y fue dado de alta horas después.
Hoy recuperado, está decidido a volver a jugar, pero por sobre todo a ayudar al semejante.
Ayer, en un noble gesto, entregó unos 2.500 dólares, parte del premio “Giacinto Facchetti - Il Bello del Calcio”, que le otorgó el diario La Gazzetta dello Sport, a la casa de la divina providencia “San Ricardo Pampuri”, al área de niños que padecen enfermedades, en muchos casos terminales.
“El premio es un dinero bastante importante, que decidí traerlo aquí a Paraguay, porque como bien todos sabemos, hay gente que necesita mucho más y va ser de mucha más utilidad que allá en Italia”, señaló. “Así que, junto con mi familia decidimos traer este dinero que nos dieron para beneficencia”.

OTRA VISIÓN. “El accidente me marcó la vida, me cambió completamente, porque me di cuenta de muchas cosas que antes, como una persona normal que no pasó por esto, no se da cuenta. Estando en el hospital, vi tanta gente que sufría y muchas veces no tenía recursos y eso ha cambiado mi visón de la vida”, indicó.
“Me di cuenta cuan importante es que alguien te dé una mano en esos momentos. Y yo quería darle por lo menos una posibilidad más para poder vivir mejor a estos niños de este hospital”, manifestó Julio, mientras el pequeño Milciades (11 años), con hidrocefalia, le acariciaba la mano derecha.
En la misma habitación, Nayeli (5) no se daba por enterada del acto y los flashes no inquietaron para nada su dulce sueño, más profundo quizás que el resto, el de aferrarse cada vez más a la vida.

TRES CHICOS. Además de Milciades y Nayeli, el otro beneficiario de la donación de Julio es Arnaldito (5). “Por ahora son ellos los beneficiarios y estamos viendo a más gente que ayudar, pero queremos entregar personalmente en donativo, porque lastimosamente no se puede confiar mucho en este país, cuando se entrega cierta cantidad de dinero a personas innominadas”, comenta Julio.
“Soy muy agradecido y he visto gente que cada día que pasaba perdía la vida, y otras que luchaban por su vida, como yo luché en algún momento por la mía”, explicó.
“Creo que le encontré un sentido o le dí un valor más importante a la vida desde mi accidente. Dejé de lado muchas cosas que por lo menos antes eran más importantes”.
Pero ahora pienso más estar con vida y poder ayudar a otras personas y estar más cerca de mi familia. Así que le agradezco a Dios el haberme dejado con vida”, señaló.

“Quiero volver a jugar, pero no me quita el sueño”
Julio sueña con volver a jugar, y diariamente entrena con sus compañeros del Vicenza. “No dejo de lado lo deportivo, tengo muchas esperanzas por sobre todas las cosas de poder volver a jugar al fútbol, pero no es algo que me quita el sueño. Ahora estoy abocado en darle una esperanza a tantas personas que por ahí se sienten incapaces por no poder hacer lo que ellos quieren, quiero tratar de demostrarles que queriendo uno puede hacer lo que se propone”, indicó.
“En este momento estoy aprendiendo un trabajo muy lindo que es el de observador y más adelante pienso empezar a estudiar para técnico. Si por ahí veo que la posibilidad de jugar al fútbol no se me da, trataré de agarrar ese camino. Tengo el apoyo de mi familia, pero será lo que Dios quiera”, sostuvo.
“La vida y Dios te dan muchas pruebas, pero también dentro de uno mismo te da la fuerza para poder superar esas pruebas, en especial las difíciles. Y hasta hoy, Dios me está dando esa fuerza para superar este momento y creo que voy a alcanzar las metas que me propongo”, dijo finalmente.

Aldo Trento: “Este gesto documenta su grandeza”
El encargado de la casa de la divina providencia “San Ricardo Panpuri”, padre Aldo Trento, se sintió muy emocionado con el gesto que tuvo Julio.
“Ver a un jugador que en su situación no solo se preocupa de sí mismo, sino del semejante, entregando esto con un gesto de caridad y amor navideño, me conmovió muchísimo, porque es un gesto que documenta la grandeza y el corazón de este futbolista”, señaló el padre Trento, italiano, que entre bromas le sugirió que cuando vuelva a jugar lo haga por la Roma.
“Desde muchos años lo he observado a este jugador y ojalá que cuando vuelva a jugar pase a la Primera división de la Roma”, señaló entre risas.
“Rezaré al señor para que Julio vuelva a ser un gran futbolista”, indicó.

El premio
El 4 de diciembre, La Gazzetta dello Sport (el diario deportivo más leído de Italia) le otorgó a Julio el “Premio Giacinto Facchetti - Il Bello del Calcio”, distinguiéndolo como el personaje más positivo del fútbol Italiano.
El premio lleva el nombre del ex presidente del Inter de Milán, fallecido este año.
Además de una escultura, el premio consistió en diez mil euros para otorgar en beneficencia. “Esta donación fue una iniciativa muy linda de La Gazzetta, que es un medio muy importante. Eso me da todavía más fuerza para seguir luchando por mí y por los demás”, señaló Julio.

SU RUTINA
“Por las mañanas hago mi rehabilitación para el brazo en un centro médico especializado que trabaja en colaboración con el Vicenza”, comentó Julio.
“Por las tardes entreno normalmente con los compañeros en el estadio Romeo Menti, del Vicenza, y los sábados y los domingos a espiar...”, dijo. Recorro por las diferentes ciudades a ver a los rivales del Vicenza, para ayudarlo al entrenador Angelo Gregucci”.
Por ahora Julio aún no hace fútbol, pero cree que “el 2007 será el año en que de nuevo empiece a darle a la redonda con todo”, subrayó.

LA FICHA
Julio Valentín González Ferreira
Fecha de Nacimiento: 26 agosto 1985
Lugar: Asunción
Edad: 26
Altura: 1,91 m.
Posición: Delantero
Esposa: María Lourdes (25)
Hijos: María Paz (5) y Fabrizio (2)
Equipo: Vicenza
Trayectoria: Guaraní 2001, Vicenza (Ita.) 2001-02; Huracán (Arg) 2002, Tacuary 2003-04, Nacional 2004, Vicenza (Ita.) 2004...
Selección: Jugó la Copa América 2004
Medalla de plata en Atenas 2004