Estos datos servirán para el cruce de llamadas en el marco de la investigación del asesinato del joven dirigente Rodrigo Quintana, que se produjo durante un asalto policial a la sede del Partido Liberal (PLRA). El día de ayer Telefuturo informó que 21 números telefónicos son los que cruzaron llamadas con Sotelo horas antes y horas después del asalto al Directorio liberal.
Entre los números podría estar el del presidente de la República, Horario Cartes, y sus fieles como Luis Canillas y José Ortiz.
El magistrado Alcides Corbeta, quien solicitó los informes a las empresas, recibió ayer el primer reporte, según informaron. En tanto que una de las compañías mencionó que no podrá brindar los datos requeridos para la investigación de quién dio la orden de atacar el PLRA, porque sus archivos de extractos de llamadas salientes y entrantes son eliminados a los seis meses.
Extraoficialmente informaron que la compañía que respondió que ya no tenía los datos requeridos por la Justicia es Telefonía Celular del Paraguay SA (Tigo), basados en la normativa legal de que los detalles deben ser guardados durante seis meses, y han pasado más de medio año.
REMISIÓN. El juez Penal de Garantías había mencionado que una vez que tuviera el informe de los extractos de llamadas de los 21 números telefónicos solicitados, lo remitiría al Ministerio Público para su análisis.
El pedido se realizó por solicitud de los familiares de la víctima fatal del ataque de los uniformados, que según la investigación fiscal había sido encabezado por el comisario Tomás Paredes Palma, ex jefe del Departamento de Investigación de Delitos de la Policía. Otro grupo de escopeteros que en las filmaciones se observa que estaban siendo guiados por el comisario principal Amado Cantero, quien sigue siendo jefe de la Comisaría Tercera de Asunción.
Rodrigo falleció al recibir varios impactos de balines de acero expulsados por un disparo de escopeta, que supuestamente ejecutó el suboficial ayudante Gustavo Adolfo Florentín Silva, quien en ese momento estaba guardando arresto domiciliario en la Comandancia, pero que, inexplicablemente, igual estuvo operativo ese día.