El joven ya tiene orden de detención por parte del Ministerio Público, al igual que otras personas que también fueron identificadas y tendrían participación.
Wilson es hermano menor de Alcides Villasboa Peralta, quien, según los investigadores, sería el autor moral del atentado.
El joven habría utilizado una pistola calibre 9 milímetros para acabar con la vida de Marcos Rojas Mora, que recibió ocho disparos en distintas partes del cuerpo.
Las balas también alcanzaron a Cristina Aranda Torres, más conocida como Vita Aranda, que falleció luego de recibir uno de los proyectiles en la cabeza.
El joven sospechoso ya habría cometido hechos de sicariato, afirman los intervinientes. “No es la primera vez que está cometiendo esta clase de hechos; ojalá pronto podamos ubicarlo y detenerlo”, indicó el comisario Sergio Insfrán, uno de los que está al frente de las investigaciones por parte de la Policía.
Luego de cometer el crimen, Wilson fue llevado hasta Pedro Juan Caballero.
Los investigadores sospechan que el que lo transportó fue el suboficial Junior Peralta, uniformado que prestaba servicio en la sede de Investigación de Delitos de Santa Rosa del Aguaray.
El vehículo en que habrían llevado al presunto sicario fue abandonado y quemado en una zona boscosa del Departamento de San Pedro.
El teléfono celular del suboficial Peralta fue incautado y tras analizar, se comprobó que estuvo antes, durante y después del evento en la ciudad de San Bernardino.
Tanto él, como Ropero Villasboa están detenidos en la Agrupación Especializada.
OTROS BUSCADOS. Además de Wilson, el Ministerio Público emitió orden de detención contra Victorino Gómez Paredes, alias Vitó; su pareja Marlene Ríos Carballo y su hijo Bruno Gómez. También contra Milciades Piedra Gómez, alias Oso Riquillo; su pareja Norma Beatriz Rojas Benítez, alias Normy o Norma Menezes; Juan Carlos Gómez Gómez, alias Señor de las armas; Juan Gabino Vera, alias Peterson Show y su pareja María Adaliz Araujo Ramírez, alias Adi.
Todos ellos acompañaron a Marcos Rojas en el sector vip del anfiteatro donde se estaba llevando a cabo el festival Ja’umina Fest.
Se maneja la información que una de estas personas fue la que entregó a Rojas en manos de los sicarios.
El motivo del crimen habría sido un ajuste de cuentas vinculado al narcotráfico.