Se trataba de una manifestación iniciada por internos para pedir la vuelta de las visitas de familiares y también de las visitas íntimas de sus parejas, en los lugares conocidos como privadas.
Pasadas las 14 horas de ayer, las comisarías que están en la zona, así como agentes militares fueron a reforzar la seguridad en el lugar.
Los internos pidieron la presencia de la ministra de Justicia, Cecilia Pérez, que se comunicó con ellos vía telemática, por videoconferencia y con esto volvió la calma.
Los manifestantes dijeron que respetarán las medidas sanitarias para que se realice la reapertura de las visitas.
La secretaria de Estado se comprometió a evaluar el pedido pero les comunicó que la decisión final dependerá de la evaluación que realice el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
A la par de la ruidosa protesta tras las rejas, también se llegaron algunos familiares portando bombos, uniéndose al reclamo.
Las visitas estaban abiertas desde la fase dos de la cuarentena inteligente, pero esto se vio interrumpido por el contagio masivo de Covid-19 en la Penitenciaría de Ciudad del Este.
Fuentes penitenciarias indicaron que no se descarta que los internos estén siendo manipulados por grupos como el clan Rotela, el Primer Comando Capital, internos ligados al prófugo Jorge Samudio alias Samura, y otros, que tendrían a su cargo la administración de las privadas.