''Dos inspectores de la Agencia Internacional de Energía Atómica llegaron a Teherán en las primeras horas del martes’’, informó IRNA, la agencia noticiosa oficial de la República Islámica de Irán. Un funcionario de la Organización de Energía Atómica de Irán confirmó la llegada de los inspectores, y dijo que la visita era ''de rutina’’.
Líderes en Teherán anunciaron el lunes que Irán había comenzado a producir uranio enriquecido a escala industrial, al operar 3.000 centrifugadoras, casi 10 veces más de lo que previamente había declarado. Las centrifugadoras se hallan en la planta de Natanz, que los inspectores de la AIEA se disponen a visitar.
Estados Unidos y la Unión Europea protestaron por la acción, señalando que Irán sigue haciendo caso omiso de las exigencias del Consejo de Seguridad de la ONU para que cese el enriquecimiento de uranio. Ese proceso puede servir a un propósito dual, como combustible en reactores nucleares, o como material para bombas atómicas.
Pese al anuncio, gobiernos y organizaciones fuera de Irán pusieron en entredicho las aseveraciones de los iraníes. Expertos estadounidenses dijeron que de manera teórica, un país puede fabricar una bomba atómica en un lapso de uno a dos años si cuenta con 3.000 centrifugadoras.
Sin embargo, dudaron que Irán tenga tantas centrifugadoras, y que se hallen en funcionamiento, dado su desparejo récord con muchas menos centrifugadoras.
En Moscú, el vocero del ministerio de Relaciones Exteriores, Mijail Kamynin, dijo que el gobierno de Rusia ''no estaba al tanto de avance tecnológico alguno en el programa nuclear iraní que cambie el formato de sus esfuerzos por enriquecer’’ uranio. El gobierno de Rusia ayudó a Irán a construir su único reactor nuclear, y conoce a fondo el programa atómico.
Francia y Australia también cuestionaron las aseveraciones de Teherán.
Jean Baptiste Mattei, vocero del ministerio de Relaciones Exteriores de Francia, también dudó del anuncio iraní. Mattei indicó el martes que ''hay anuncios, y existe luego la realidad tecnológica’’.
Y en Sidney, el ministro de Relaciones Exteriores de Australia, Alexander Downer, enunció dudas similares acerca de la capacidad de Irán para producir grandes cantidades de uranio enriquecido. ''No estoy seguro si eso es verdadero o no’’, dijo Downer. - (AP)