Solo el 20% de los trenes habituales estaban programados durante la jornada, todos ellos entre las 07:30 de la mañana y las 18:30 de la tarde, y en algunas líneas cesó la circulación por completo en la sexta huelga del sector desde junio.
Ciudades con importante actividad portuaria como Swansea (Gales) y Portsmouth (Inglaterra) quedaron incomunicadas por tren a raíz del paro, que volverá a repetirse este sábado.
Además de empleados de 14 compañías ferroviarias, participan en los paros miles de trabajadores del operador Network Rail, responsable de las vías y la señalización, por lo que la actividad de las firmas que no participan en la huelga también ha quedado afectada.
El secretario general del sindicato del transporte RMT, Mick Lynch, aseguró que el sector está dispuesto a mantener de manera “indefinida” la disputa, mientras que un portavoz del Ministerio de Transporte lamentó que “los líderes sindicales han optado de nuevo por infligir miseria y problemas a la vida diaria de millones de personas”.
Las huelgas de este verano han retrotraído a los británicos al histórico “invierno del descontento”, tres decenios atrás, cuando el país se paralizó por las protestas contra los límites a las subidas salariales impuestos por el primer ministro laborista James Callaghan.
Este verano, numerosos sectores han vuelto a expresar su descontento con la situación económica. EFE