“Considero que fue de gran ayuda el feriado largo, ya que todos los días venían turistas a buscar habitación”, destacó una de las trabajadoras del hotel Katty María, ubicado en las inmediaciones de la Basílica Menor.
La explanada de la Basílica como las plazas fueron otros espacios utilizados para que cientos de personas de todas las edades pernocten. Los hogares que habilitaron baños, cobraban hasta G. 5.000, también lograron una buena recaudación.