El documento, escrito con una buena caligrafía, se extrajo del interior de las nalgas de la talla de un Cristo del siglo XVIII y está firmado por el capellán de la catedral de Burgo de Osma (Soria), Joaquín Mínguez.
Las responsables del hallazgo son dos restauradoras de la empresa Da Vinci Restauro que bajaron la imagen del altar y retiraron un paño que protegía la parte trasera de la talla. Explican que los pergaminos contienen información económica, política, religiosa y cultural de la época, informó el portal de noticias ruso Sputnik.
Por su parte, Efrén Arroyo, historiador y promotor de la restauración, ha asegurado a la agencia EFE que el hallazgo es sorprendente, ya que, “si bien es normal que muchas esculturas estén vacías, no lo es tanto encontrar en su interior documentos escritos a mano”.
“Es muy numerosa su cosecha muchos años, tanto que en estos tiempos se ha visto, por no haber sitio en las bodegas, tirar mucho vino”, recita uno de los pergaminos.
Describe además las enfermedades más comunes de su tiempo, fiebres tifoideas que duraban tres o cuatro días y que se conocían como tabardillos y dolores de costado. Y como no podía faltar, también se encontraron temas relacionados a la política.
Los pergaminos serán conservados por el Arzobispado de Burgos, y las restauradoras guardarán en el interior de la escultura una copia para que, en el futuro, otros también puedan transportase en el tiempo con ayuda de los pergaminos.