En conferencia de prensa realizada en la Unión Industrial Paraguaya (UIP) referentes de los distintos gremios sentaron postura de categórico rechazo al proyecto de ley y la medida de fuerza que impulsan los camioneros.
La propuesta legislativa que fija un costo operativo y una tarifa del servicio del transporte de cargas figura en el quinto punto del orden del día de la sesión del Senado de la fecha. No se sabe si los que promueven la ley podrán tratarlo y aprobarlo en mayoría.
Beltrán Macchi, en representación de la Feprinco, arrancó la conferencia sosteniendo que “los gremios nos hemos adherido a la posición de no aceptar la fijación de precios por ley porque eso claramente va en contra de nuestros principios constitucionales”.
Afirmó categóricamente que no aceptarán la imposición de precios porque “es el camino hacia un abismo, hacia un destino negro que podemos ver en países de Latinoamérica cuyos ciudadanos están sufriendo las consecuencias de decisiones desacertadas de autoridades en el pasado”.
Aseveró que fijar precios del transporte por ley es como atacar el corazón del sistema económico y jugar con fuego, “porque todos sabemos que uno de los pilares del desarrollo y crecimiento del Paraguay es su estabilidad económica y si empezamos a hacerlo tenemos el camino a una inflación alta de más de dos dígitos y que afectará a las personas de menores ingresos y destruirá toda la base económica”.
Pidió a los legisladores que dejen el ámbito privado que negocie entre las partes y hacían un llamado al diálogo para encontrar una solución a esta controversia. En abierta alusión al senador del Frente Guasu, Sixto Pereira, calificó de “indignante que miembros del Poder Legislativo como un senador se convierte en líder y arenga a una de las partes cuando que su función es buscar el bienestar de toda la ciudadanía”.
En el mismo sentido y énfasis se refirieron Pedro Galli de la ARP, Enrique Duarte de la UIP, Alfredo Fast (Fecoprod), Jaime Egüez (Club de Ejecutivos), Ernesto Figueredo (Cncsp) y Jorge Samaniego (Cipama).
Todos coincidieron en que este tema se ha politizado, se podría encaminar al país a “caer en una Venezuela o Cuba”. Plantearon el diálogo como salida y no la sanción de la citada ley y también consideraron que es una minoría de camioneros la que está en huelga, pero impide que miles de sus pares que quieran trabajar no lo puedan hacer.
Plantearon como salida convocar a una negociación y también denunciaron que nunca fueron llamados para debatir y sentar postura sobre el proyecto de ley.
Asimismo, exigieron que la Policía y la Fiscalía hagan respetar el derecho al libre tránsito y al trabajo.