Roberto Fernández fue sancionado con dos partidos de suspensión, por lo que se pierde el clásico. Ayer, tras conocer su sanción, se despachó contra el árbitro Carlos Amarilla, de quien dijo: “El informe (de Amarilla) casi pide que vaya a la cárcel”.
“Lo único que faltó es que diga que vaya preso. Decía que era una jugada brusca, intencional, criminal decía... Este señor siempre me persigue y me saca tarjetas”, acusó el portero, muy dolido.
“Ya en el juego contra el 12 de Octubre me había sacado una tarjeta amarilla por los seis segundos de retención, que ya no se cobra; además no me demoré, y él vino y me dijo que no me haga el simpático”, agregó.
“PORQUE SOY YO”. “Creo que él se tomó conmigo por el solo hecho de ser yo”, dijo además el Gatito. Pero luego analizó: “Dios quiso que sea así". “Aunque no niego, tenía muchas ganas de jugar el clásico, pera ahora todo mi apoyo va para Ezequiel (Medrán)” sentenció.