Samuel Acosta
@acostasamu
El Fondo Monetario Internacional (FMI) en un reciente informe sobre Paraguay hace un análisis sobre la situación de las cajas de pensiones, tanto públicas como privadas en el país.
Dice que el Paraguay está experimentando un cambio demográfico, pues la esperanza de vida ha pasado de 63 años en 1950 a un promedio de 77 años en la actualidad, con proyección de llegar a 83 años en 2100.
“Las perspectivas demográficas de Paraguay apuntan a un aumento de la proporción de personas en edad de jubilación y una disminución de la proporción de personas en edad económicamente activa, lo cual tendrá importantes implicaciones para los programas de pensiones y salud en el futuro”, alerta.
Según el análisis de los técnicos del FMI, así como están hoy los planes de pensión, la mayoría experimentará déficit en algún punto del horizonte de los próximos 20 a 30 años.
Los desequilibrios de la Caja Fiscal son los más urgentes, ya que se trata de un programa importante que ya ha registrado déficits y cuya situación continúa. “Se prevé que la Caja de la ANDE y la Caja de Itaipú continuarán registrando superávits anuales por algún tiempo, aunque el envejecimiento de la población implica que para 2050 ambas cajas registrarán déficits”, alerta el Fondo.
También estima que la Caja Bancaria sufriría un deterioro hacia finales del horizonte pronosticado, pero en este caso no existe un pasivo no financiado. En cualquiera de estos casos, añade el FMI, si no se toman medidas correctivas surgirán problemas de equidad si los ingresos de los jubilados son mayores que los de la población aportante.
REFORMAS. Para los analistas del FMI, una reforma paramétrica (relación de aportes versus beneficios) podría eliminar los déficits previstos en las cajas. Señala varios escenarios de reforma, empezando con un aumento de la edad de jubilación, pasando de los 60 años actuales a los 65 y un recorte de 10% en la relación entre prestaciones por beneficiario y el PIB por trabajador.
También habla de un aumento de 10% en la tasa de aportes. Para cada programa en el que se determine la existencia de un pasivo no financiado, se plantea una configuración de reformas que podrían eliminar la brecha.
“En los casos del IPS y de la Caja Bancaria, el aumento de la edad de jubilación basta para eliminar con creces la brecha, y esa misma medida prácticamente elimina la brecha en el caso de la Caja de la ANDE. En el caso de la Caja Fiscal, cuyas perspectivas son las menos favorables, se necesita una combinación de las tres reformas”, subrayan.
El FMI dice que cualquier plan para incrementar las tasas de aporte debe tener en cuenta los niveles ya elevados observados en algunas pensiones. “Si se aumentara la edad de jubilación, será necesario de forma consecuente el cálculo de las prestaciones, para que el ahorro generado por las jubilaciones aplazadas no se vea anulado por los mayores pagos de pensiones”, dicen.
Respecto a la Caja Fiscal, consideran que la estandarización de las prestaciones entre las diferentes carreras podría ser una manera de generar ahorros y mejorar la equidad.
Finalmente, sobre el IPS dicen que la reforma deberá tener en cuenta su incidencia en la pobreza y desigualdad, así como en la informalidad, en vista de una cobertura más amplia para dicho programa.
Opiniones
“La situación de las cajas es preocupante”
“Es hora de que el sector público y el privado discutan qué solución se pone en práctica para los seguros a futuro. Así como están hoy, irán a la quiebra técnica”, alerta el analista económico Ricardo Rodríguez Silvero. En su opinión, se necesita contar con una superintendencia que verifique la situación de las cajas, pero con participación privada en el consejo asesor, y buscar la mejora en el sistema de inversión de la Caja Fiscal a través de la diversificación. “Hay que ver la forma de prolongar los años de aporte para asegurar el ingreso neto positivo”.
“Hay que mejorar el sistema de inversión”
El titular de la Caja Bancaria, José Caballero, considera que se debe mejorar el sistema de inversión de las cajas, para lo cual llegar al grado inversión sería clave. “Tenemos un problema de afiliación de empleados, sobre todo con corresponsales no bancarios. Creo que la mejora va más por que todos aporten, antes que ampliar el porcentaje y los años”, consideró. “Si no tomamos acciones hoy el problema nos va a caer muy rápido. Las empresas están tercerizando el servicio pagando con factura para no abonar a un sistema de pensiones”.
“Encontrar salidas sin afectar a nadie”
“El éxito de las reformas que se planteen estará en hacer cambios sin afectar los derechos de quienes hoy ya se encuentran bajo el sistema actual”, considera el presidente del Instituto de Previsión Social (IPS), Benigno López. Refiere que el regulador de las cajas debe ser manejado por el sector público y cerrar la discusión sobre el aporte histórico que el Estado no ha hecho saldando la deuda con los maestros. “Las bases de una reforma están sentadas para que el próximo gobierno que sea electo en abril de 2018 tome este tema”, resaltó.