Víctor Colmán, presidente de la asociación, informó que la Cámara de Senadores dio media sanción con algunas modificaciones en lo que respecta al artículo 6 que señala que los herederos de los excombatientes que perdieron la vida cobrarán una indemnización equivalente a 3.000 jornales mínimos.
Es decir, alrededor de G. 234 millones. Mientras que los combatientes que participaron directamente en los combates desarrollados hace casi 30 años recibirán un pago de 2.000 jornales mínimos. Cerca de G. 156 millones.
“Estamos completamente de acuerdo en todo lo que se aprobó en la Cámara de Senadores, con las respectivas modificaciones. Esperamos que el Poder Ejecutivo se haga eco del proyecto que creemos que es justo y necesario y corresponde”, apuntó Colmán.
advertencia. Indicó que están observando que a medida que avanza la ley están apareciendo “personas inescrupulosas” que buscan sacar algún beneficio. “Quieren venir a peticionar ahora que este proyecto está avanzando. Le recomiendo a esta gente que trabaje por un nuevo proyecto y que presenten desde la perspectiva donde están ellos”, expresó Colmán.
Remarcó que soldados rasos de la época y suboficiales son dos cosas diferentes. “A esos militares que solicitaron que se amplíe el listado les sugiero que nos dejen trabajar tranquilos hasta que se apruebe la ley”, aseveró. Acotó que están preocupados porque aparecen algunos abogados que se ofrecen y piden porcentajes a cambio de apurar el tema. “No necesitamos gestor”, dijo.