16 abr. 2024

Entre luces y sombras, el Gabinete presidencial soporta la cuarentena

La actitud de Julio Mazzoleni y de Euclides Acevedo contrasta con la pobre imagen que reflejan otros secretarios de Estado durante la pandemia y el manejo de la crisis sanitaria por el Covid-19.

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Sin lugar a dudas, la pandemia puso contra las cuerdas al Estado en todas sus formas.

Si bien las medidas sanitarias de distanciamiento social y la cuarentena están mostrando la absoluta incapacidad de las instituciones gubernamentales para dar respuestas urgentes, eficaces y eficientes a sectores vulnerables, el Ejecutivo encontró un respiro en la gestión de algunos secretarios de Estado.

En ese contexto, dentro del Gabinete presidencial existen algunos ministros que se destacaron en este tiempo, como el propio ministro de Salud, Julio Mazzoleni, y el ministro del Interior, Euclides Acevedo, dos hombres que supieron dar al Ejecutivo un buen manejo de la crisis. Antes de la pandemia, el titular de la cartera sanitaria no era para nada un ministro que se destacaba en sus funciones y el Ministerio de Salud sufría desde hace décadas la improvisación de un sistema que nunca preocupó a la clase política tradicional.

Sin embargo, la pandemia hizo que Mazzoleni saque chapa de su liderazgo. Actualmente es uno de los hombres más respetados dentro del Gabinete, a la par de estar respaldado por un excelente equipo de profesionales médicos como Guillermo Sequera, el viceministro Julio Rolón y el Dr. Juan Carlos Portillo.

En las redes sociales se observa un alto nivel de confianza de la ciudadanía en las acciones del Ministerio de Salud. Dentro del Gabinete, es palabra santa y todo el operativo pasa por sus manos.

No obstante, el hecho de que el Ministerio de Salud no centralizó la ayuda económica deja un manto de dudas en el manejo del dinero público y abre la posibilidad de que otras instituciones realicen compras sospechosas o, por lo menos, llamativas.

Otro de los ministros destacados durante esta pandemia es sin dudas el ministro del Interior, Euclides Acevedo. Su forma peculiar de comunicar y transmitir el mensaje de modo a alertar a la ciudadanía sobre las consecuencias del coronavirus generó mucha recepción y respeto.

Acevedo aparentemente se ganó también el respeto de toda la cúpula policial por defender sus derechos.

Un escalón más abajo se encuentra el ministro de Obras Públicas, Arnoldo Wiens, cuya secretaría de Estado se destaca por realizar varias obras en este lapso, incluida la construcción de dos hospitales de contingencia, una en Ineram y otra en Itauguá, los cuales ya solo se encuentran ultimando detalles.

El ministro de Educación, Eduardo Petta, en medio de la incertidumbre del sector educativo, busca desesperadamente establecer medidas tecnológicas para que no se pierda el año lectivo. Sin embargo, esto le valió críticas debido a que casi el 80% de alumnos no cuentan con un sistema tecnológico.

Entre los ministros más criticados figuran Benigno López, titular de Hacienda, y la ministra de Trabajo, Carla Bacigalupo. Ambos por la falta de ayuda y de estrategias impulsadas por esta cartera ante la desaceleración económica.

Liz Cramer, de Industria y Comercio, y Alejandro Peralta, del Mitic, prácticamente pasan desapercibidos.

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