07 feb. 2025

El Vaticano amenaza a Lugo con sacarle los privilegios de obispo

Ante la noticia de la renuncia, la Santa Sede dio su primera respuesta de rechazo. El cardenal Giovanni Batista Re le advirtió que revea su decisión o de lo contrario sería sancionado incluso con la pérdida del monto que recibe para sus gastos personales.

La renuncia a la vida consagrada para ingresar a la arena política hecha por Fernando Lugo cayó como un balde de agua fría sobre los miembros de la cúpula católica en el Vaticano.
La Iglesia, como primera reacción negativa, envió a Lugo una admonición para que “revea su decisión” de ingresar al ámbito político porque de lo contrario sería sancionado con “la suspensión de todas sus funciones pastorales”.
Según monseñor Zacarías Ortiz, obispo de Concepción, la nota enviada por el Vaticano es como un preaviso para que Lugo desista de su candidatura presidencial, “porque no corresponde a un consagrado incursionar en política”.
Monseñor Ortiz indicó que el castigo eclesial para Lugo será la pérdida de todos los beneficios que tiene por su condición de obispo.
Con esta sanción Lugo perderá los derechos a realizar los sacramentos de la Iglesia Católica, que son el bautismo, la confirmación, el matrimonio, la eucaristía, la reconciliación (confesión) y las órdenes sagradas.
El obispo de Concepción también explicó que Lugo ya no recibirá el financiamiento de la Iglesia para solventar sus gastos personales porque ese dinero proviene de los fieles y que reciben los consagrados “por su labor pastoral”.
La advertencia del Vaticano fue enviada por el cardenal Giovanni Batista Re, que es el prefecto de la Congregación de los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina.
“En la Santa Sede está el cardenal Re, que es como el presidente de la congregación de obispos, delegando al papa Benedicto XVI para atender cualquier tema que afecta a los obispos de todo el mundo”, manifestó Ortiz.
Monseñor Ortiz indicó que la admonición enviada por el cardenal Re a Lugo está refrendada por el Papa. “Es seguro que el Santo Padre ya tiene conocimiento de la decisión de Lugo”, apuntó.
Si bien lo que Lugo necesita a los efectos legales para poder candidatarse es la pérdida de la condición de obispo, una sanción del Vaticano implica enfrentamiento y ruptura conflictiva con la Iglesia, lo que justamente quería evitar.
Su salida sin el consentimiento de la cúpula católica podría tener efectos negativos en su futura carrera política.

Pasará la Navidad en Encarnación

Fernando Lugo festejará la Navidad con sus parientes que aún residen en Encarnación. Según comentaron fuentes cercanas, el ex religioso viajó ayer hacia esa ciudad para pasar la fiesta en un ambiente familiar y tranquilo.
Luego de oficializar su incursión en la arena política y su intención de ser candidato presidencial para el 2008 resolvió tomarse unos días de descanso aprovechando la Navidad.
Si bien el viernes pasado había dicho que mañana hablaría de sus planes políticos, el viaje hacia el interior del país hace suponer que no será así, a no ser que lo haga en Encarnación.
La postergación de Lugo tiene que ver con el pedido del nuncio apostólico, Orlando Antonini, de que esperara hasta que la carta de renuncia llegue a manos del papa Benedicto XVI para hablar de política.
Siendo un pedido del representante del Vaticano en Paraguay y teniendo en cuenta que Lugo busca que su salida de la jerarquía católica sea lo menos conflictiva posible, se comprometió a postergar el lanzamiento de su candidatura hasta que la nota esté en el Vaticano.